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Un día tranquilo en Aberdale.

Soleado, alegre quizá demasiado.

La campana de la escuela sonó.

Un pequeño niño rubio corriendo torpemente, cargando a su amigo de cabellera rapada y atrás, un niño de cabeza singular corría tratando de alcanzar a sus amigos. Los tres cargando sus mochilas.

Deteniéndose en una heladería, dando 3 billetes doblados con trozos de cinta transparente cubriendo las partes rotas.

-Tres helados por favor, jiji- pidió amablemente el rubio-

-Uno de vainilla- pidió Sumo-

-Uno de avellanas- pidió Jeff-

-Y, y yo quiero de chocolate- dijo Clarence para finalizar-

Recibiendo sus helados los tres niños salieron de la heladería y se dirigieron a casa de Clarence.

Una escena de lo más triste, algo solo pensado por el ser de mente más traumada y planeada por el más ruin villano.

El helado de Jeff calló sobre el césped.

-Ay...mi helado- chilló Jeff-

-¿Quieres del mío?- preguntó Sumo acercando su helado al rostro triste de Jeff-

-Eh... No, gracias- dijo incómodo alejando la mano con el helado escurriéndose-

Sumo decía cosas a lo bajo.

Era obvio que odiaba cuando quería ser amable con Jeff y él se comportaba como un tonto.

Pero ya lo conocía, y no quería tener otra discusión más.

Llegando al hogar de Clarence, los niños terminaron su helado, o al menos dos de ellos, se recostaron sobre el verde pasto del patio delantero y comenzaron a platicar.

La tarde se pasó en pláticas tontas, comunes de un niño aún inocente.

Mary gritó el nombre de Clarence quien inmediatamente se levantó de donde se encontraba recostado y se dirigió a el interior de su hogar.

-Vuelvo en un momento- habló para desaparecer de las vistas de ambos-

Jeff sacó un libro de su mochila y comenzó a verlo.

Sumo lo miró algo curioso, ese libro no era parte de los que utilizaban para estudiar en la escuela.

-¿Qué es eso?- preguntó curioso.

-Un libro, dah-

-Acabas de caer muy bajo con ese chiste-

-Lo se- río- es un álbum de fotos-

Ambos chicos comenzaron a observar cada una de las fotografías.

Fotos de cuando Jeff era un bebé, fotos de el con sus madres, recuerdos de vacaciones

-Uh, recuerdo esa- señalando una foto del álbum-

Aquella foto no era más que su grupo del jardín de niños.

-Hmm... Lucías adora— quiero decir, aún luces adorable- habló Sumo-

-¿Qué?- preguntó confundido, queriéndose reír por lo anterior dicho-

-Si, que luces muy adorable, ya sabes, eres muy lindo-

Se formó un silencio.

Un silencio incómodo.

Podían romperlo con cualquier estupidez, pelear por cualquier cosa o un chiste fuera del tema.

Para colmo, Clarence no venía para acabar con aquel momento.

-Eres un tonto- habló al fin Sumo- un tonto muy lindo-

Jeff lo vio de reojo, pero solo dio un golpe débil en el brazo de su amigo quien respondió con una risa burlona.

-Tu también lo eres- se detuvo en seco- solo un poco-

Ambos rieron y Sumo abrazó a Jeff, un simple abrazo que provocó que Clarence gritara con ternura desde la entrada de su casa.

-¡OH CIELOS!...¡ya se llevan bien! jiji ¡ya son buenos amigos-

Ambos se separaron bruscamente y se miraron de reojo, aparentando enojo.

Akfkskdk ctm, me va costar escribir un romance inocente y tierno visto desde la perspectiva de un niño:'( lpm
Pero acepto el reto uwu

【Normal】✧{Jeff x Sumo} ❴Jefmo❵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora