Luego de que aquellas 9 personas se enterarán de que, su papá, Kris, abandonó la casa para irse a China y cumplir un sueño desconocido, a esos respectivos 9 chicos no se les ocurre mejor idea que preguntarle a su otro padre acerca del tema, el cual...
Solo pretendía despertar a Jongin, solo eso. Nunca se esperó terminar así con alguien, y menos con esa persona.
Kyungsoo, -sin saber cómo- se encontraba tirado en la cama de Jongin, y por supuesto con el más alto arriba suyo, acorralándolo con ambas manos apoyadas en los costados de su cuello, se encontraba confundido ¿El por qué? Simple, el moreno lo había empujado, tenía ya claras sus intenciones hacia Kyungsoo, es más, pensaba que el contrario sentía lo mismo por él -o eso creía-, pero al parecer el más bajo se percató de su propósito y fue eso, lo que lo llevo a hacer lo imposible para que no sucediera lo que se vendría pronto o por lo menos no ahora, no se sentía suficientemente listo para hacer... Eso. Es decir, si, lo admitía, sentía algo, algo por Kim Jongin. ¿Pero que decirles? Kyungsoo era de esas personas que casi ya ni existían en este mundo, las cuales verdaderamente se tomaban en serio las relaciones y lo sabía. Pero por más que Kyungsoo le gritara lo que gritara o le golpeara más de lo que debía golpearlo, Jongin ni se percató en soltarlo y preguntarle que rayos le pasaba, al contrario, estaba harto, harto de esperar tanto. Habían pasado... ¿Cuánto? más de 3 años, tal vez más-no tenía ni idea ya-, y nada había sucedido entre los dos, eso era una terrible vergüenza y más si eras una persona como Jongin, a quien le importaba una mierda esperar. En todo ese momento que había transcurrido, Kyungsoo sentía cada vez más y más cerca la respiración de Jongin y eso lo llevo a pensar en alguna estrategia para salir de ahí, la necesitaba y rápido, sabía que si el moreno empezaba a tocarlo o a besarle, él se descontrolaría y eso terminaría mal, muy mal. Por eso pensó que decirle lo siguiente, lo haría escapar del asunto en el que se encontraba, claro está, mal había pensado, -esto empeoraría las cosas-.
-¡Jongin yo no te amo! -fue lo único que se le ocurrió decir a Kyungsoo, para así después de exclamar eso, dejar escapar una lagrima que salía de su ojo izquierdo sin haberlo previsto, mirando fijamente a través de los ojos cafés del más alto.
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Luego de tanto drama Kyungsoo salio como alma que lleva el diablo, para luego dejar a un Jongin sin aliento.
-¿Que...? -pregunto a la nada.
Mientras tanto abajo.
Minseok se había enredado con unas redes que se encontraban en el suelo. Y ahí estaban. Los dos. Jongdae quien abrió la puerta al oír a Minseok gritar, confundido y en el suelo, junto con Minseok quien se había caído justamente arriba de él.
Un silencio incómodo.
Minseok por fin, en toda su vida, había sentido la necesidad de besar a Jongdae, imaginaba que, si no lo hacía se vendría el fin del mundo. ¿Así se siente estar enamorado? No lo sabía, era inexperto en estas cosas, jamas se sintió tan atraído por algo... O por alguien, y eso lo llenaba de curiosidad, y justo en ese momento muchos sentimientos se mezclaban en la mente de Minseok, lo que lo llevo a pensar... ¿De verdad me gusta la persona que tengo al frente? Y si me gusta tanto... ¿Por qué no le puedo decir cómo me siento? ¿Estaré confundiendo amistad con amor? Pero... ¡Jongdae es mi hermano, no mi amigo! De todas las formas que pensara Minseok que esta relación "si funcionaria" cada conclusión que sacaba lo llevaba a estar más confuso que antes y eso lo hacía sentir peor, porque, por más que quisiera estar con Jongdae, sabía que se interpondrían muchas en su camino.
