Sólo en tus brazos,
en tu camino atractivo...
frente a tus ojos terrosos,
dividido en tu cuerpo...
soy tan solo unos dedos
escalando tus calles...
una figura que desaparece
reflejado por la luz tenue,
Un corazón sangrando el camino
entre la humedad y la niebla,
la hierba y la cebada,
un intenso dolor en la cabeza,
un garabato en el mapa,
huellas que borre,
bocas que bese en cada esquina,
mis pisadas en la madrugada,
mis lágrimas estampadas en el suelo,
quiero llegar a tu corazón,
Me enamore tanto de este lugar,
que ya no extraño desde donde llegué...
Porque aunque sufri, reí y amé.
Todo lo viví aquí.