Capítulo 1

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Una vez que llegué, escanee rápidamente el lugar, era un tipo de bar/restaurante y todos mis ex compañeros de preparatoria estaban allí. Para ser honesta nunca me agradó mucho esa época y no tengo buenos recuerdos de los primeros dos años, una vez que llegue al tercer año conocí al grupo de personas que iban a hacer de mi preparatoria la mejor experiencia posible. Toda la generación estaba allí y no podía evitar un poco de ansiedad y nervios, yo había cambiado mucho tanto física como mentalmente.
-Recuérdame de nuevo la razón por la cual estamos aquí. -le dije a mi mejor amiga, Adriana, Adri es mi amiga desde la secundaria y nos llevamos muy bien desde entonces.
-Ugh... vamos Lucy, es bueno recordar viejos tiempos, por aquí deben estar nuestros amigos y hace mucho tiempo no podemos estar todos juntos... y ¿quien sabe? A lo mejor y vuelvas a ver a Dereck, un crush de preparatoria nunca se olvida ...
-¡Ajá! Como si le hubiera hablado... estoy segura que ni se acuerda de mí ya, me habló un par de veces y por compromiso. -le dije recordando todas las veces que Dereck me hablaba sólo  porque sus padres estaban presentes y esperaban un saludo cortés de su parte hacia mí, aunque vivíamos a la par e íbamos a la misma escuela, la mayor parte del tiempo él me ignoraba, tomábamos el mismo camino de ida y de vuelta  pero nunca me habló.
- ¿¡Y acaso eso importa!? Eso fue hace mucho tiempo Lucy, te fuiste a vivir a otro país y nunca supiste de él...los tiempos cambiaron, tú cambiaste...¿pierdes algo con hablarle hoy? Estoy segura que te va a recordar...
-Mmm, probablemente sí pierda algo... ¡la poca dignidad que me queda! -le dije tratando de desechar  el recuerdo de la vez que lo saludé en la preparatoria y me ignoró al frente de todos.
-Ya déjate de payasadas, si lo encuentras no pierdes nada en hablarle, confía en mi, estoy segura de que ésta vez no te ignorará.
Dejamos la conversación de mi crush a un lado y nos dispusimos a firmar la "asistencia" y entramos en busca de nuestros amigos, una vez que los encontramos fuimos a saludarlos y a tomarnos muchas fotos. Nos sentamos todos a la mesa y empezamos a conversar sobre nuestras carreras, unos seguían estudiando, otros estaban trabajando, algunos ya tenían familia, otros seguíamos solteros... Fue bueno recordar todas las tonteras que hacíamos en esos tiempos, ver lo lejos que habíamos llegado todos y mientras estábamos recordando la vez en la que decíamos que nos sentíamos mal para ir todos a la enfermería y quedarnos allí hablando; miré hacia atrás de un amigo, Daniel, y allí estaba en una esquina, ese hombre que cada vez que lo miraba me quitaba la respiración, recordé todas la veces  que cuando íbamos de camino el simple hecho de que me pasara a la par ya hacía que mi corazón dejara de latir unos segundos.
Y justo en ese momento en que lo vi hicimos contacto visual, pero no era el mismo contacto visual de antes en el que me ignoraba, esta vez no me ignoró.

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