hi, baby; supercorp

donuts

Había sido un día pesado para Lena. El tener su propia empresa se encontraba realmente agotador. Un sueño, pero agotador.

Era casi de noche cuando la azabache entró a su oficina, su estómago rugió ya que no había comido algo en todo el día desde el desayuno, pero estaba tan cansada que lo único que hizo fue tirarse en su sillón blanco. Su estómago rugió de nuevo y la ojiverde hizo una mueca ante eso, pensó en llamar a Jess para pedirle que le trajera algo de comer pero entonces recordó que le había dado su día libre; esa chica trabajaba todo el día por lo que realmente merecía de un descanso.

Lena hizo un puchero, realmente necesitaba comer algo, su estómago comenzaba a doler, en eso notó una desconocida caja en su escritorio. Ella no recordaba haberla puesto o recibir algo de alguna persona, Lena se levantó y se dirigió a ella. Al estar ya cerca un olor delicioso llegó hacia sus fosas nasales, no tardó nada en abrir la caja.

Donas. Su salvación.

Tomó la primera dona de la caja y le dio un mordisco, suspirando de felicidad al sentir la delicia en su boca, a lado de la caja también notó un vaso de café, en ella había una nota pegada.

Obviamente. Pensó la Luthor con una sonrisa y tomó la nota cuidadosamente.

"Vi que hoy tuviste un día muy ocupado, te movías a todos lados y te saltaste tu hora del almuerzo, me preocupé y se me ocurrió traerte algo para comer. No es lo más sano pero al menos es algo.
Espero que también te guste este regalo.
Te quiero <3.
K.D"

"Eres mi salvación, Kara." Rió Lena tomando el café en sus manos dándole así un sorbido.

Y de nuevo, la chica de acero se encontraba fuera del edificio, estaba acostada flotando en el aire, entonces  escuchó lo que la ojiverde dijo.

"Tú también eres mi salvación, Lena." Dijo sin evitar poner una sonrisa en su rostro.