Toco el timbre del receso y se alejaron todos de mi, excepto Justin.
-Como pudiste...- susurre con un hilo de voz y lágrimas en mis ojos.
-Me obligaron, ____
-¡Eres un cobarde!- le golpee en la mejilla haciendo que su rostro se inclinara a un lado
No me miro, solo mantuvo la cabeza baja.
-Lo lamento, pequeña. Si tan solo supieras...- lo interrumpí
-¿Si tan solo supiera que?-seguía llorando, por suerte no había nadie a nuestro alrededor.- Que te hiciste mi amigo, hiciste que abandone mi hogar y ahora resulta que eres un verdadero idiota. ¿eso quieres que entienda?- limpie mis lágrimas- Ya no hace falta que me lo expliques, ya lo entendí.
Di media vuelta y seguí mi camino por el lado contrario del instituto. Justin gritaba a mis espaldas pero lo ignoraba. No quería escucharlo, ni hoy ni nunca.
(..)
Camine por horas sin saber a donde ir. No tenia hogar. Escape de mi casa por Justin, y ahora ese mismo hombre me traiciono.
Pare al ver que estaba en el medio de la nada. Una calle desconocida estaba a mi alrededor, ya era tarde y no es una buena idea quedarme la noche en este horrible lugar.
Veía a lo lejos que se aproximaba un auto. Es el primer auto que veo desde que estuve aquí, así que aproveche el momento e hice señas para que el auto frenara. Pero no fue así. El auto me ignoro y siguió su camino.
Pasaron diez minutos y otro auto se aproximaba. Volví a hacer señas y nuevamente fui ignorada.
Pasaron veinticinco minutos desde que paso el ultimo auto. Seguía sentada en el medio de la calle y todavía no pasaba otro. Pude distinguir a lo lejos venir un camión. Hice por tercera vez señas para que frenara y gracias a Dios, el camión freno delante mio. Tenia las ventanillas muy oscuras y aun permanecía cerradas. Di tres toques suaves para que la persona que conducía pudiera bajar y hablar conmigo. La ventanilla bajaba de a poco y hacia un ruido detestable. Un viejo asomo su cabeza por la ventana y agacho su cabeza para mirarme.
-¿Te puedo ayudar en algo, preciosa?- dijo al mirarme. Su voz me sonaba conocida, solo que no recuerdo bien donde la escuche.
-Buenas tardes señor - conteste con amabilidad- es que estaba caminando y me perdí. Necesito volver a mi hogar.- dije mirando hacia arriba. No podía ver bien su rostro, el camión era bastante alto.
El hombre subió la ventana del camión, por unos minutos creí que se iba a ir. Pero no,al contrario, me hice a un lado para que el señor pueda abrir tranquilamente la puerta.
-Hermosa jovencita, ¿te acuerdas de mi?- hablo mientras bajaba del camión. Seguía sin poder ver su cara pero aun así su voz me sonaba bastante familiar.
-¿Disculpe?
Saco la gorra que tapaba su cara y al verlo, retrocedí unos cuantos pasos con miedo. Era el, el viejo asqueroso que me había violado.
-¿Ahora te acuerdas de mi, ____?- dijo con una sonrisa victoriosa.
-Ya-ya no necesito que me lleve a mi-mi casa
-No tengas miedo cariño. Ahora sube al camión. A Ryan le encantara saber que estas aquí.-
-¡Vayase al infierno!- grite y empecé a correr.
Corrí lo mas rápido que pude para no ser alcanzada por ese anciano. El camión me seguía y se freno delante mio, impidiéndome el pase.
-Maldición- susurre con la voz entrecortada por correr
El bajo del camión y se dirigió hacia mi. Hubiera corrido en dirección opuesta, pero ya no tenia energía para hacerlo.
-Seras mía- dijo para después reírse en mi cara.
Serré los ojos esperando a que me agarrase pero no fue así. Abrí los ojos y para mi sorpresa el estaba tumbado en el suelo con sangre el la nariz. Parecía estar inconsciente.
-Si quieres estar a salvo, sígueme.- dijo un chico alto ofreciendo me la mano con sangre.
.¿Qui-quien eres?-
-Solo sígueme, no te haré nada malo.
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No Me Lastimes (Justin Bieber y Tu) Drama
FanfictionCada crítica, cada golpe, cada mirada, cada palabra que salían de su boca era solo para lastimarme... para hacerme mas débil.