¿Que paso antes?

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Hace relativamente mucho tiempo, en el verano de 2010, me mude de Neiva hacia Cali, dos ciudades muy diferentes la una de la otra. En Cali me ingresaron en un colegio joven, que no tenía más de 10 años desde su inauguración. Allí conocí a mucha gente, hice amigos en casi todos los grados, todos los profesores me adoraban y tenía grandes compañeros que nunca olvidare. Entre esos estaban Daniel y Paula, dos grandes amigos que nunca dejaban de estar juntos.

Parecían casi que hermanos, a pesar de que era la época en la que aun existen las típicas diferencias entre niños y niñas, aun se creía de parte de los niños que las niñas daban asco. Que el abrazarlas era solo necesario cuando lo mandaban las mamás o las profesoras. Esto no significa que no jugaran juntos ni nada, solo significaba que no se tocaban ni se mostraban cariño.

A pesar de lo que hacía todo el mundo, Daniel y Paula se la pasaban juntos todo el tiempo, cuando llegaban por la mañana y cuando se iban por la tarde, se daban un abrazo. Siempre cuidaron el uno del otro, si Daniel se caía, la primera que se daba cuenta era Paula, esto pasaba al revés también. Ellos dos entraron al colegio al menos unos dos años antes que yo, aproximadamente a los 7 o 6 años, posiblemente antes pero mi memoria no llega tan lejos.

Para el momento en el que yo ingrese, ya tenían uno 9 años recién cumplidos, recuerdo invitarlos a mi fiesta de cumpleaños número 9. Durante ese año me gusto Paula, me gusto bastante y me hice muy amigo de ella. A Daniel no le molestaba esto debido a que el la veía más que todo como una amiga, prácticamente como una hermana. Además, él y yo éramos muy buenos amigos, a los nos gustaban mucho las mismas cosas.

En ese colegio, karate era una clase obligatoria, Daniel y yo siempre nos la tomamos muy enserio. A diferencia de nuestros compañeros, que la veían más como un momento para jugar y hacer posiciones "shaolin", otro pequeño grupo de niños, Daniel y yo, tratábamos de hacer los katas y las posiciones como era debido. Pensábamos que estábamos en una de esas películas de artes marciales donde dos hermanos o amigos estudiaban bajo un mismo maestro y competían para ver quién era el mejor.

Paula era una niña muy tímida, tierna y en cierto modo, delicada. Era muy estudiosa y aplicada también, por lo tanto, en karate también le iba bastante bien. Ella y Daniel eran los cinturones de más alto rango en la clase. Los dos se ayudaban mutuamente en todo.

Paso todo segundo grado, que fue el último año del colegio en esa sede, ya que al parecer habían comprado una hacienda a las afueras de un pueblo que quedaba a media hora o una hora de la ciudad. Esto para que el colegio pudiera recibir más estudiantes para los nuevos grados, para que tuviera más espacio y se realizaran todas las actividades que la directora quería hacer.

Este cambio no maravillo a los tres, fue excelente el cambio de la ciudad al campo, de un colegio no más grande que una plaza pequeña, a uno con su propia cancha de futbol tamaño completo. Uno con piscina, cancha de básquet y salón de escultura en arcilla. Este cambio nos permite ser más libres en todos los sentidos, lo cual hizo que nuestra amistad se resaltará más.

Esto tristemente solo fue al principio, debido a que entraron compañeros nuevos y a que Paula estaba creciendo y prefirió estar más con sus amigas que con sus amigos, Daniel y yo nos quedamos relativamente solos.

Daniel también comenzó a juntarse con otras personas, lo mismo hice yo. Él se hizo muy amigo de Salomón, José Vicente y yo me hice muy amigo de Nicolás, al punto de llevarlo a considerar como un hermano de otra madre. Esto no significa que nos dejamos de juntar con Paula, cada vez que podíamos hablábamos con ella y jugábamos.

Siguiendo la línea de los discípulos que compiten por ser el mejor, seguimos dándolo todo para ser los mejores me la clase de karate. Incluso en algún momento comenzamos a "desarrollar" un nuevo arte marcial, llamado Takchido. Con el que queríamos crear una sociedad de asesinos para liberar a Colombia de la guerra y llevarla a la paz. Digamos que las noticias nos influenciaban demasiado. Aunque no basamos en la idea de una sociedad de asesinos gracias a un videojuego del mismo tema.

Al final ese proyecto quedó abandonado, por el bien de todos, y comenzamos a fijarnos en cosas más... acordes a nuestra edad. Paula aún me gustaba, pero debido a una confusión tuve que decir que ella ya no me gustaba más. Bueno, la confusión fue que yo le pedí que fuera mi novia, ella me dijo que sí, pero al día siguiente me terminó, debido a que sus papás no le permitían tener novio a los 10 años, lo cual es comprensible.

Gracias a este insistente, y para mantener mi orgullo, cuando me preguntaron quién me gustaba, tuve que decir otra persona que no fuera Paula, por eso me terminó gustando esa persona que no era Paula y ella salió de mi radar. Supongo que la vida está llena de coincidencias, porque cuando me dejó de gustar Paula, Daniel y ella volvieron a ser muy muy amigos, recuperaron esa amistad que había entre ellos dos.

Fue interesante como se trataban, todo el mundo esperaba que se volvieran novios a la semana. Incluso yo molestaba a Daniel de vez en cuando diciendo que le gustaba Paula y que le daría muchos besos y abrazos. Él siempre estaba a la defensiva y en una posición muy negativa respecto a este tema, pero no sé la forma en la que lo haría alguien para no pasar pena o no decir lo que siente realmente. La forma en la que él lo decía era demasiado... concreta, demasiado real, como si de verdad lo que decía fuera lo que pensaba.

Nadie sabe realmente cómo funcionan los sentimientos, son demasiado complejos y cambian sus procesos y la forma en que los realizan dependiendo de la persona. Por lo tanto, es difícil comparar el cómo reaccionaría una persona a con reaccionaria otra persona en el ámbito sentimental. Daniel no podía parar de ver a Paula cómo una amiga, como una hermana. El concepto del amor de novios no era algo conocido para él.

Paula sí había logrado encontrar, conocer ese tipo de sentimientos gracias a mí, a otras personas que también gustaron de ella y a sus amigas fanáticas de telenovelas juveniles. Una forma de conquistar a una chica es tratándola bien, eso de actuar como un chico malo o un chico al que se le tiene que rogar por una gota de atención funciona, pero en casos específicos. No todas las chicas son iguales pero la mayoría llegaba seguir diversos patrones de comportamiento que las define como "chicas comunes".

El ser una chica común no es algo malo, como la sociedad hoy en día a tratado tanto de demostrar, simplemente significa que eres un ser humano que ha vivido una vida promedio, una vida "normal". A este tipo de chicas se les puede enamorar de una forma que suena sencilla, y la es, pero que mantenerla y aplicarla constantemente puede llegar a ser complicado. Sí un hombre es atento, cariñoso, demuestra que le importa una chica y la apoya, tiene el camino abierto al corazón de esa chica.

Con este método, el ser buena persona, Daniel inconscientemente fue ganando el corazón de Paula, hasta que ella llegó a enamorarse de su mejor amigo, algo que es muy cliché tanto en la vida real como en cualquier medio audiovisual por el cual se cuenten historias. Este enamoramiento pudo haber sido influenciado también por la insistencia constante de nuestros compañeros, diciendo que Paula y Daniel eran novios y que se iban a casar.

Para este punto de la historia, mi vida iba a cambiar mucho, debido a que me tenía que mudar a otro país. Por otra coincidencia de esas que la vida ama regalar, un mes después de mi partida es donde comienza la historia real, la historia de Paula y Daniel. Por qué a pesar de que mientras yo estaba y Paula le gustaba Daniel, ellos dos nunca tuvieron nada. Debido a la timidez de ella y a la ignorancia de Daniel respecto al tema, no se pudo visualizar ningún tipo de conexión amorosa más allá del amor entre amigos.

Ahora daremos inicio al comienzo de nuestra historia, donde estarán los errores, consecuencias y lecciones que Paula y Daniel tanto quieren compartir con el mundo para que nadie más cometa esos errores. Trataré de no usar muchos diálogos, debido a que fueron ya hace mucho tiempo y en ninguno estuve presente, y los que vivieron esas conversaciones no recuerdan las palabras exactas. Sólo escribiré las conversaciones más importantes y necesarias, para evitar algún tipo de confusión.

La casualidad mas linda de mi vidaWhere stories live. Discover now