One-shots[Yuri]--Yandere Sim

◇1◇[AyanoxMegami]

Una chica de cabello completamente negro corría desesperadamente a su colegio, se había levantado tarde y si no se apuraba llegaría tarde, corriendo por los pasillos y escaleras casi completamente vacíos logro divisar su salón de clases.

— ¡lo logre! —dijo la chica feliz, había entrado a su aula y todavía no estaba su profesor.

Sentándose en su silla se dispuso a sacar el cuaderno de la materia correspondiente, el profesor no tardo en entrar a clases, con un su carismática forma de ser empezó a impartir las clases.

—Onee-Chan­—la peli-negra se dio la vuelta para toparse con un rostro conocido.

—Hanako—dijo— ¿Qué haces aquí?

Se encontraban en la hora de descanso, en la hora en que los estudiantes solían vagar y contar chismes. La peli-negra se sorprendió de que la más pequeña estuviera enfrente de ella y no molestando a su hermano como solía hacerlo.

—Vamos, el tiempo es corto—dijo, mientras arrastraba a la mayor a uno de sus clubs favoritos.

—Oh, es bueno verlas por aquí—se encontraban en la puerta del club de cocina y la dulce voz de Amai fue escuchada.

El olor a pastel recién horneado, hizo babear a las dos peli-negras.

—Ayano-San, hacia un tiempo que no venias por aquí—dijo Amai con su dulce voz al igual que sus pasteles.

—Veo que ambas tienen mucha hambre—no solo Hanako, sino que también Ayano babeaba sobre el pastel.

— ¿Está bien que comamos? —pregunto una avergonzada Hanako.

—Claro—Amai rio un poco.

—AmaiChi, es genial— dijo Hanako abalanzándose encima de ella.

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Con el estómago lleno de pastel, Ayano llego a clases no pudo concentrarse en ningún momento, maldijo haberse dejado llevar por ese apetitoso pastel.

Ya terminadas las clases se encontraba paseando por el pasillo de los clubs, la peli-negra no estaba en ninguno pues no le llamaban la atención. A lo lejos vio una puerta abierta, la curiosidad le gano así que entro.

En una de las sillas se encontraba, un computador que se encendió apenas ella entro, dejando ver en la pantalla una figura femenina que le decía acusatorias palabras. Los estudiantes tuvieron hace unas semas que enfrentar una cruel noticia, una de las alumna había sido asesinada y se sospechaba que el culpable era otro alumno.

La personalidad solitaria de la peli-negra había hecho que se convirtiera en una sospechosa, pero ella era inocente, lastimosamente hasta la presidenta del consejo estudiantil la acusaba.

Un poco lastimada la chica salió de la habitación.

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Pasaron varias semanas y al fin la presidenta se presentó, Megami Saiko dando un discurso del porqué de su atrasada llegada, miraba hacia el público buscando una persona en especial.

Ayano caminaba por los pasillos sintiendo una mirada sobre ella, cuando abrió su casillero se topó con una nota extraña que la citaba para encontrarse en el árbol del cerezo.

Pensaba la chica que era una broma, pero fue por curiosidad.

Ayano estaba recostada en el cerezo, con una expresión neutra, cuando fue abrazada por detrás.

—No pensé que vendrías—dijo una voz elegante que ella ya conocía.

—Tú... ¿Qué quieres de mí? Megami-San

—YA, LES HE DICHO QUE NO FUI YO—dijo con impotencia.

— ¿Crees que por eso te citaría aquí?

—Entonces, ¿Por qué?

—Lo que pasa es que tu...

—Me gustas, Ayano-Chan

­­—EHH.. ¿¿QUE??

—Shh­—le susurro­—Buena chica

Dijo esto para luego besarle.