Skins [Joerick] Terminada.

f o u r

—Es lo mejor que pude hacer con un corto aviso—Zabdiel se queja— Y a todos nos gustan los bolos ¿Cuál es el problema?

—Pensé que íbamos a un club—Erick argumenta—yo no estoy de acuerdo en pasar mi noche libre lanzando bolas por un carril con ustedes cuatro.

—Yo nisiquiera sabía que habían bolos en Argentina—Dice Richard, y a veces Joel se pregunta si Richard habla sólo para sentirse incluido, por que eso es.

—Vamos a ir a un club más tarde—Interrumpiendo antes de que Erick pueda resoplar algo no tan halagador a Richard por ese comentario —Bolos primeros, todos nosotros, como antes. Va a ser divertido.

Ese "Como antes" les llega a todos, Joel ve el momento en que sucede, la forma en que Chris sonríe y Erick mueve sus pies en el suelo con las manos enterradas en sus bolsillos, sus hombros caídos. El lo siente también, cualquier vacilación yéndose por que sería bueno, en realidad, hacer algo que solía hacer. Antes de que crecieran, cambiaran, fueran tan grandes que hacer este tipo de cosas fue demasiado difícil de planificar.

La mirada de Erick se levanta, encontrándose con la de Joel. Joel mastica su labio inferior, y se niega el ser el primero en romper el contacto visual.
Erick parece decidido a no romperlo, tampoco, que los deja atrapados allí, en un encuentro de miradas que sólo es es ocasionalmente interrumpido cuando uno de ellos parpadea.

—Vamos a conseguir nuestros zapatos— Zabdiel palmea a a Joel en el hombro y Joel finalmente aparta sus ojos de Erick, mientras Zabdiel asiente con la cabeza en dirección a Erick.—Voy a traer los tuyos y los de Erick. Ustedes dos hablen.

Zabdiel tira de los demás dejado a Erick y Joel de pie allí, justo dentro de la boleta. Hay una maquina de garra al lado de ellos, llenos de juguetes baratos en los que gastarias más de lo que valen tratando de ganarlos. Todos en el local está alquilado para ellos, las únicas otras personas que están son empleados, lo que significa que está muy, muy tranquilo. A lo lejos se escucha A Zabdiel y Chris discutiendo mientras Richard tira de sus zapatos de boliche, y desea que fueran más ruidosos por que el silencio se siente opresivo.

—¿Hablar de que?—Erick finalmente pregunta, sus cejas levantadas, expectantes, algo guardando en sus ojos como si estuviera esperando otra pelea, ya está preparado para ello.

Joel frota la parte posterior de su cuello—Se supone que debo pedirte disculpas.

Erick resopla—Una disculpa no cuenta si alguien te obligó a pedirla, Joel.

Joel odia eso, la fue a distancia de la voz de Erick. Así no es como se supone que sea. El y Erick deberían estar allí con los otros, riendo entre sí mientras que Erick arruga la nariz entre los zapatos de boliche, y Joel casi cayéndose tratando de ponerse los suyos. Se supone que deben despeinarse el uno al otro hasta que sean un desastre, empujando de los hombros el uno al otro juguetonamente, riendo como si fuera en serio. No mirándose el uno al otro, tensandose  y listos para otra discusión, separados del grupo.

—Lo digo en serio—dice Joel honesto y sincero—Lo siento por todo últimamente.

Erick lo mira por un segundo antes de que su sonrisa tire de sus labios y luego se rinde, sonriendo de llenos a Joel—¿De verdad?

—No me gusta pelear contigo, lo odio, de hecho. Es lo peor

—Si, es una mierda. Yo ni siquiera realmente, como que, se lo que lo inició en primer lugar.

Joel traga, pensando que el sabe, Al menos. Pero el no va a decirlo ñ en voz alta, si lo el lo dice en voz alta que lo hará verdad y eso arruinaria todo.
—Así que, ¿Bolos?