She will punch you in the face

Reto

Su hermano era pésimo eligiendo lugares para ir a 'divertise'. Habían llegado a un Bar exclusivo de la ciudad. El olor a alcohol más la mala iluminación del lugar fueron suficientes para que deseara huir. Desgraciadamente para él, sus hermanos lo obligaban a quedarse hasta que ellos desearan, como si todavía fuera un niño.

"¿Por que tan solo malcriado?" podía ver como Rachel ahora se sentaba por su lado izquierdo en la barra con un trago en su mano.

"Odio estos lugares, están llenos de perdiciones"

"no me extraña eso de ti, pero ve el lado bueno, esas perdiciones tiene buen rato mirándote" con su cabeza señalo a la dirección en donde podría ver un grupo de mujeres que lo veían muy coquetamente.

"No me interesan" regreso su mirada a la bebida que estaba tomando, sin darle importancia al asunto.

"¿eres demasiado bueno para ellas?" pregunto divertida.

"Quizas" le presumió con una sonrisa. Escucho una pequeña risa provenir de ella que le hizo sentir algo extraño en su estomago nuevamente, tal vez ya había bebido demasiado.

"Hey malcriado" volvió a decir ella "¿te quieres ir?" al parecer por fin había notado su incomodad en ese lugar.

"Quisiera, pero los idiotas de mis hermanos no me dejan irme"

"Déjame eso a mi, tengo un plan" con eso vio como una mueca traviesa atravesaba su rostro.

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Llegaron a una mansión vacía una hora después, al final el plan de la chica funciono, solo decir que le dolía el estomago debido a un problema femenino fue suficiente para que sus hermanos no la cuestionaran, inmediatamente mandándola a casa en su compañía.

"Por una vez en tu vida hiciste algo bien" le dijo mientas iban pasando a los pasillos que encaminaban a las habitaciones.

"Muy gracioso, en lugar de agradecerme" cruzo sus brazos sobre sus pechos "si no te hubiera ayudando por lo menos yo todavía estaría con un trago en mi mano" sonaba algo decepcionada.

"¿No querrás decir en busca de clientes?"

"¿Alguna vez dejaras de molestarme con eso?" se veía exasperada. si fuera sincero, no, nunca le dejara de referirle eso, por el momento era lo único que podía usar en su contra.

"Vamos" la tomo del brazo "te invito un trago, ya sabes, de agradecimiento" La guió a la siguiente puerta que estaba a su derecha, abriéndola para dejarla entrar.

"¿La biblioteca?"

"Aquí es donde padre guarda sus mejores cosechas de vino"

Mientras sacaba una botella del mini bar que su padre tenia instalado, vio como ella se paseaba por los libreros pasando sus dedos por el lomo de los libros. Llevaba un vestido negro corto que le quedaba pegado al cuerpo y su cabello algo alborotado, tenia que admitir que se veía muy bien.

Ahora Rachel se sentaba en uno de los sofás que daban a las ventanas, el se le acerco con sus copas recién servidas, acompañándola en el sofá.

"¿Donde aprendiste a defenderte?" era una duda que tenia desde el primer día que experimento su fuerza.

"Si una mujer quiere vivir en Gotham tiene por lo menos ser principiante en defensa personal" tomando un sorbo de vino. "Hablando de defensas, gracias por tratar de defenderme de ese hombre" miraba su regazo "pero sabes, eres algo lento, yo te puedo enseñar a dar un buen golpe" vio como escondía una risa detrás de su copa.

"pff..." bufo "soy experto en mas de 4 artes marciales, te derrotaría en un segundo" le dijo seguro, dejando su copa en la mesa de a lado.

"Yo ya te derrote una vez, así que tu punto es invalido"