Luxus© [Pecados #1]

Capítulo 2

Luxus no podía creer las locuras que salían de Gabriel, Baal también pensaba igual que él, por qué ni bien Gabriel había terminado de hablar, Baal comenzó a reírse en su cara. Incluso había lágrimas a causa de la risa. ¡Lágrimas!

—Déjame ver si entiendo, él, ya sabes, Dios, envió al gran mensajero, es decir, a ti. El gran Gabriel, uno de los Arcángeles más famosos, el más ocupado, para transmitir un mensaje. Y no cualquier mensaje uno de suma importancia a nosotros— muevo mi mano señalando a mis hermanos—. No me la creo, pero adelante continúa, obviamente sea lo que sea, por ser una orden directa del gran Dios, nosotros lo obedeceremos sin duda.

Gabriel no parecía importarle el sarcasmo en mí, de hecho su rostro estaba totalmente estoico, ¿Por qué no pueden dejarnos tranquilos? Ellos no se metían en problemas, ni siquiera cuando se alimentaban, no les interesaba participar en una guerra, esto era entre dios y sus ángeles y lucifer y sus generales, Ni Luxus ni ninguno de sus hermanos obedecían las ordenes de ningún general, no obedecían a Dios, y no se metían con ninguno de los dos bandos.

—Podrías dejar de ser sínico un segundo, no quiero hablar con todos ustedes, solo contigo— señala Gabriel, ¿Por qué conmigo? — después de todo eres el líder del grupo de mixtos más poderoso en siglos— Espera, ¿qué? — lo que sea que digas lo harán ellos— señala el resto de mis hermanos, y por lo que puedo percibir esto está por convertiste en un caos.

—Deja que te deje claro un par de cosas ángel, Luxus no es mí líder, no es el líder de ninguno— señala Greed, es un milagro que Pride su hermano no esté aquí, ser el hijo de la soberbia no lo hace el muy tratable—. Estoy aquí por qué alimentarse es sencillo, y me quedo con Luxus porque su casa es cómoda.

—No estoy hablando contigo, hijo de la avaricia—. Gabriel contestó con simpleza, su rostro no mostraba nada además de masculina belleza, no pude evitar pensar que se sentiría alimentarme de el— ya que te reúsas a hablar en privado lo diré, Dios quería que te advirtiera. No es común que haya un hijo de cada príncipe, algo está sucediendo, pero no me quizá decir qué, solo me dijo.

»Que ustedes siete eran la piedra angular, sobre la cual el apocalipsis podría o no estar sucediendo, Lucifer los quiere de su lado, aunque de momento solo sabe sobre ti, hay muchas cosas sucediendo al mismo tiempo, pero el hijo del rey de los demonios, debe mantenerse escondido, tal como lo está haciendo, cada uno de ustedes debe mantenerse escondidos.

»Sus habilidades son inimaginables, ni siquiera él sabe cuánto poder albergan en su interior, pero dijo que siete y siete tienen que trabajar juntos, la línea entre lo bueno y lo malo es delgada y la decisión de Luxus Asmodeo será la que inicie o termine todo.

La habitación quedo en silencio. Y Gabriel desapareció.

— ¿Qué demonios acaba de decir? ¿No puede ser cierto? — Archer comenzó a gritar, mientras que Desidiam se recostaba en su silla, intentando procesar todo.

Me gire hacia Baal, se veía preocupado, yo estaba preocupado.

— ¿Qué vamos a hacer? — mi voz es ronca y logro mantener mi expresión serena, como si no me molestara nada, siento que no estoy en control, y no me queda otra opción que jalar poder de su reservas de lujuria para poder mantener el control.

—Deberíamos hacer pública nuestra presencia ante nuestros padres y demostrarles que no vamos a ser controlados—. Sugirió Archer con un tono de irritación, y la verdad es que ese era un ben plan, pero no somos tan poderosos como nuestros padres, ellos son príncipes con milenios de años.

Todos asintieron, dejando claro que apoyaban esa idea.

—Podemos pensar en eso, aunque estoy de acuerdo creo que cada uno deberían hablar con sus ángeles, para que les de sus libros, si quieren hacer esto.

»Hacernos público, tendremos que ser lo muy fuertes, yo en particular me niego a ser un peón de los príncipes, además tengo que hablar con Pride, él es el más débil de nosotros, y necesita estar de acuerdo con esto. Cuando todos comenzaron a llegar les deje claro que no tomaría decisiones por ustedes, y que solo había una regla, mantenernos en un perfil bajo.

Todos están de acuerdo, uno a uno todos mis hermanos comenzaron a desaparecer, hasta que solo quedamos Baal y yo.

— ¿Estás seguro de esto? Hay muchas cosas que podrían salir mal.

Eso ya lo sabía pero, las palabras de Gabriel, solo hicieron realidad mis temores, nunca en la historia has existido hijos de todos los pecados al mismo tiempo, por lo menos no que fueran medios humanos.

—No queda de otra Baal.