En nuestra relación habían problemas, eso es verdad. Pero, ¿Llegar al punto de no hablarnos? ¿Éramos novios o amigos lejanos? Podían pasar días sin tener noticas de ti, pero eso no era todo. Cuando volvías a aparecer, era por una hora, a veces hasta minutos. Realmente te necesitaba.
Siempre creí que te aburría, supongo que nuestra falta de autoestima también contribuyó a que se arruine todo. Yo parecía tener mucha confianza en mí misma, pero realmente nunca estaba segura de hacer o decir ciertas cosas. Tú no te esforzabas en ocultarlo, a distancia se notaba que eras tímido, miedoso, desconfiado.
Recuerdo a esas personas que nos intentaron separar, y al final lo consiguieron. Tú por tu camino y yo por el mío, justo como querían. Aunque nos volvimos a encontrar, supongo que eso no estaba en su plan. Tal vez realmente estemos destinados a estar juntos, ¿No? Es decir, si nuestros caminos volvieron a cruzarse es por algo.
Nunca nos dimos el amor que mutuamente merecíamos, ese fue nuestro principal problema. Aunque felizmente recuerdo las veces que me hiciste reír, sonreír, amar de verdad. Eso lo tengo en cuenta.
Fuiste una gran compañía cuando te lo proponías. Pero a veces simplemente no lo eras.
ESTÁS LEYENDO
Cartas sin sentimientos.
Non-Fiction¿Cuántas veces deseé no tener más sentimientos? Aquella niña que era feliz desapareció, pero algunos rastros de ella siguen justo aquí. Una niña que está triste, que es un despilfarro de emociones sin ningún destino, que simplemente desea no haberte...
