Thirsty

❝lυcας❞

"Lucas", escuché la voz de JungWoo-Hyung detrás mío y giré el rostro en respuesta.

"¿Si, Hyung?"

Sonreí cuando vi sus labios curvarse de manera tímida creando una semiluna en su rostro. Era demasiado para mi pobre corazón.

"¿Te gustaría ir a comer algo fuera?", asentí. Comer y estar con JungWoo era lo mejor que me podía pasar después de un día entero de práctica. Agarró gentilmente de mi sudadera y tiró de ella, mientras comenzaba a andar. Le seguí sin dejar de sonreír y decidí entrelazar mis dedos con los suyos. Un sonrojo apareció en su rostro cuando lo hice y sentí cómo me arrancaba la respiración por completo.

"Hyung...", murmuré, dejando de andar y haciendo que el moreno parase. Se giró, aún con esas adorables mejillas teñidas de un suave rosa pastel. Me acerqué más, le necesitaba más cerca. Separó ligeramente los labios sorprendido ante mi cercanía.

"¿Qu-Qué estás... haciendo...?", su respiración agitada chocaba contra mis labios y sus ojos no abandonaban los míos. Posó su mano en mi torso, haciéndome suspirar ante ese contacto inesperado. Nuestros labios estaban rozándose cuando-

"¡Wong Yukhei!"

Me desperté con un golpe de almohada directo a mi cara.

"¡¿Eh?!", me incorporé en la cama sorprendido, asustado y aún medio dormido. "¡¿Qué pasa?!", busqué en mi alrededor de dónde procedía la voz que me había tirado, seguramente, la almohada contra la cara.

Vi a JungWoo ya vestido con ropa de deporte y su mochila preparada para salir.

"Lo que pasa es que vamos a llegar tarde por tu culpa."

¿Tarde? ¿A dónde?

Oh... ohm...

Oh mierda. Tenemos que hacer otro stage hoy.

¡MIERDA!

｢ ❁ 」

"Gracias a Dios que habéis llegado a tiempo", dijo TaeYong-Hyung cuando nos vio bajar de la furgoneta. Soltó un suspiro aliviado y DoYoung-Hyung comenzó a reírse ante la reacción del líder. Agarró su hombro y lo agitó.

"Está bien TaeYonggie-Hyung, relájate no vaya a ser que ahora te dé un ataque al corazón."

"Ataque el que me vais a dar vosotros al final. Venga, entrad a que os preparen de una vez", se acercó a nosotros con DoYoung-Hyung para poder regañarnos y como de costumbre, el conejo siempre le llevaba la razón.

"Pero, Hyung, no es que siempre estemos llegando tarde...", dije en mi defensa. Los tres se me quedaron mirando fijamente.

"Dime una sola vez en la que hayáis llegado bien a hacer un showcase", dijo JaeHyun-Hyung, el cuál se unió hace unos instantes porque ya sabía qué era lo que estaba pasando.

Me quedé en silencio, pensativo.

"Vale, siempre llegamos tarde", admití y gané una carcajada por parte por DoYoung-Hyung. Nuestro amado, pero en estos momentos no tan amado, líder retomó su sermón pero le disuadieron para parar. Si ya llegábamos mal de por sí, hay que imaginarse el tiempo que perdíamos con esas reprimendas.