capítulo 14

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14-momento de felicidad

Abro los ojos para encontrarme con los rayos del sol en mi cara.

Por la ventana se podía apreciar el hermoso día que hacía hoy.

Me estiró sobre la cómoda cama y me levanto lentamente para ir al baño.

Una vez adentro lavo mi cara y cepillo mi pelo,estos días estuve mejorando con respecto a mi apariencia.

Luego de tener a Olimpia volví a ser como antes,ya no tenía ojeras,ni estaba tan delgada y podía dormir bien.

Hasta note que me crecieron los pechos pero eso es porque tengo un bebé.

Salgo del baño y me dirijo al armario a buscar algo para ponerme.

Escogí un vestido negro simple que es por arriba de las rodillas y unos tacones bajos.

Luego me puse polvo alargue  mis pestañas suavemente y pinte mis labios de un color claro.

Salgo de la habitación para ir a ver a oli y cuando llegó a su cuarto puedo ver que duerme plácidamente como un angelito.

No entiendo cómo esta cosita podría causar daño alguno.

Nunca jamás permitiría que alguien le haga daño,la protegería siempre y daría mi vida por ella si fuera necesario.

Salgo del cuarto y voy a la cocina a buscar el desayuno.

Ahora como híbrida necesitaba sangre y más seguido.

Saco una bolsa de sangre de la heladera y la vuelco en un vaso de vidrio para luego tomarmela mientras uso mi iPhone viendo todas las notificaciones.

Cuando terminó lavo el vaso y lo dejo de donde lo saqué.

Camino a la sala y puedo ver que Rebekah se está pintando las uñas como siempre de color rojo.

-Porque no usas otros colores?- le pregunto

-El rojo es mi favorito,Como la sangre-

Sonrio y me dirijo a las escaleras.

Vuelvo a entrar a la habitación de oli y está estaba despierta mirando por la ventana.

La tomo en mis brazos y me asomo por la ventana y puedo ver cómo su curiosidad se refleja en esos hermosos ojos celestes.

Era tan hermosa,no me cansaria de decirlo jamás.

-Mi pequeña,tan inocente-

Ella me mira y me sonrie.

Me quedo embobada mirando sus ojos pero hay algo extraño en ellos estos se tornan de un color celeste oscuro y luego siento como mis ojos se cierran lentamente sin saber que causa que los cierre.

Los abro y puedo ver que estoy en una playa,al rededor puedo apreciar los bosques que la rodean y la linda vegetación que los acompaña.

Dirijo mi vista al mar,precioso y calmado,las olas rompían con gran fuerza y me llamo mucho la atención la suave brisa fresca que asotaba mi cara.

Sin embargo eso no fue lo que llamó mi atención.

Lo que llamó mi atención fueron los dos jóvenes que estaban sentados en aquella playa,a orillas del mar.

Estaban tomados de la mano y la bella chica tenía la cabeza apoyada sobre el hombro de aquel joven.

Me pareció muy tierno y romántico.

Ellos se paran y empiezan a caminar tomados de las manos.

Se dirigen hacia mí y puedo notar cierto parecido en esa chica.

Su cabello negro azabache totalmente lacio sin ninguna onda,su perfecta nariz y sus hermosos ojos celestes como el cielo y esos rasgos tan familiares y entonces lo comprendi.

Era Olimpia.

De alguna manera era ella de grande,era tan hermosa y se veía feliz con aquel joven que tenía tomada su mano.

La veo caminar lejos de mí y trato de seguirla pero todo se empieza a hacer borroso para luego ver todo negro.

Abro los ojos de golpe y puedo ver su mirada volver a la normalidad,a ese celeste cielo que tanto me gusta.

-Que fue eso?- me pregunto mientras miro a mi pequeña.

Ella me había mostrado algo ,pero que podía ser.

***
Luego de darle de comer a oli y cambiarla la deje con Nick para que esté con ella un rato.

Por lo que ví se la llevó al parque junto con Rebekah.

Lo que me hace pensar donde está el otro mikaelson.

Bajo las escaleras y entro a la sala para verlo sentado leyendo el periódico.

-Buenos días Helena- me saluda cuando me ve

-Hola- digo simplemente

-Todo está bien?- me pregunta

-Si bien,Rebekah y Klaus se acaban de ir- le informo

-Si los escuche-

-Y cómo estás?- le pregunto

-Muy bien la verdad,feliz de poner tener una sobrina tan hermosa,gracias- me agradece

-no hay de que- le digo

Me detengo a mirarlo por unos segundos,es tan hermoso,su pelo castaño peinado elegantemente,su nariz muy bien marcada que encaja a la perfección con sus labios finos y carnosos a la vez,sus ojos negros de un negro oscuro y profundo que hace que te quedes embobada mirándolos.

Siempre viste de trajes,todos muy elegantes,lo hacen ver muy sexy y hace que toda mujer lo desee.

Noto como él también me mira pero su mirada se torna cada vez más oscura y por instinto me acerco cada vez más a él y sin previo aviso estampa sus labios contra los míos.

Es como si fuera nuestro primer beso,especial,dulce,amoroso y apasionado.

Sus labios son lo mejor que probé en mi vida y agradezco poder besarlos.

El beso se empieza a profundizar y ahí supe que el día recién empezaba.

Condenada©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora