You're just a pawn. [EXO Kris]

14- Dulce pesadilla

La luz se filtraba a través de las cortinas. Abrí los ojos pero un dolor inundó mi cabeza. La luz era muy fuerte; decidí abrir los ojos poco a poco, haciendo que el dolor fuerá menos.

Estaba en lo que parecía una habitación de hospital, pero era color verde opaco, sólo había una ventana, y un sillón café al fondo de la habitación; me encontraba conectado a unas máquinas, mis brazos tenían agujas que suministraban un líquido transparente. En aquel sillón se encontraba una persona. Dormida.

Intenté ponerme de pie, pero alguien me detuvó.

-Has despertado.

-¿En donde estoy?- mi voz estaba áspera a falta de uso.

-Tendré que avisarle que has despertado. Se pondrá muy feliz. Ella se alegrará.

-¿Ella?, ¿De quién carajo hablas?, Aún no has respondido a mi pregunta- el dolor de cabeza se hizó más fuerte.

-Es una larga historia Kris, y no soy el indicado para decírtelo. Lo único que te diré es que estas a salvo.

-¿Y Bang?, ¿y mi amigo?

-El se encuentra bien, está algo delicado aún; sufrió un severo golpe en la cabeza. Quedó inconsciente. Pero se está recuperando rápido- dijo caminando hacía la salida.

-Ah, por cierto, mi nombre es Byun Baekhyun. Soy parte de los Lobos Blancos. Y también... primo de el líder. De... Leah-. dijó esas últimas palabras con demasiada cautela, haciéndolo sonar como.un susurro, saliendo de la habitación antes de que pudiera decirle algo.

Quedé totalmente en shock al escuchar su nombre, entonces no fué un sueño aquellas palabras. Escuchar su voz no fué un delirio provocado por el dolor. Ella. Ella está viva.

La alegría de poder volverla a ver era difícil de asimilar. Pero no sólo estába feliz, también estaba confundido, miles de preguntas llenaron mi cabeza. ¿Líder de los Lobos Blancos? ¿prima de el famoso Byun Baekhyun?.

Pero de que me he perdido.

Una persona entró a la habitación, sacándome del trance en el que estaba.

Ella. Era ella.

Su largo cabello caía debajo de sus hombros, dando unos pequeños saltos. Su piel blanca, brillaba, sus tenúes labios rojos combinaban armoniosamente con su cabello.

Era perfecta. Aún lo seguía siendo, al igual que en mi mente. En mis recuerdos.

Se acercó a mi con lágrimas en sus ojos. Su rostro mostraba demasiadas emociones.

-Estas... viva- mi voz temblaba. Yo temblaba. Estaba llorando.

Se acercó a mi y tomó mi rostro entre sus pequeñas manos. Ella también temblaba.

-Claro que lo estoy. Tú me salvaste.

Juntó sus labios con los míos. Creando un beso suave, nuestros labios se movían torpemente, para después tomar un camino de necesidad. El beso se hizó más profundo. Estaba lleno de emociones, de, amor. Podía sentir su corazón palpitar. Ambos llorábamos. Queríamos prolongar ese momento lo más que pudieramos. -Estas viva- dije separando mis labios para tomar un poco de aire. -Estoy soñando. Esto no es verdad. Yo te vi, yo... te vi morir. Dime, ¿esto es una dulce pesadilla?, ¿es una broma cruel y pronto despertaré?. ¡Dímelo!-.

No paraba de llorar, no sabía que decir. Estaba callada.

Pasamos así lo que pareció una eternidad; con el silencio dominando en la habitación. No se movía, su cabeza miraba el suelo.