Prólogo.

731 60 12
                                    

Samantha.

¿Alguna vez se han imaginado tener superpoderes? Bueno, cuando era pequeña siempre quise tener los poderes de Superman. De hecho siempre fui imprudente y más de alguna vez quise probar suerte, tratando de hacer mucha fuerza ó achinaba mis ojos con fuerza; a ver si lanzaba rayos ó si podía ver a través de las cosas. Pero todo fue en vano.

Siempre pensaba que no pertenecía a este mundo, ya que no encajaba con mis demás compañeros de secundaria. Siempre fui una chica solitaria de hecho, y me pareció extraño cuando tiempo después, en la universidad un chico me invitó a salir. Fue algo nuevo para mi. Por supuesto ya había dejado las tonterías de mi niñez atrás, y me resigne a pensar que era alguien reservada nada más.

Cuando tuve a Ruby todo cambió. Mi mundo entero, todo mi ser, se dedicó únicamente y explícitamente a ella. A pesar de las adversidades y ser madre soltera. Logré con el tiempo salir adelante, me gradué y obtuve un trabajo decente, que con el tiempo fui escalando de posición en posición. Logré crear mi propia micro empresa más adelante; hasta mi punto de culminé. Lena Luthor, decidió trabajar conmigo, convirtiéndome en su asociada. Eso me llevo directo a National City.

Hasta aquí todo normal, pero nunca me imaginé que...de nuevo, mi mundo cambiaría. Y no de una bonita forma como la primera vez.

Justo ahora con mi hija íbamos a la presentación del monumento construido por Lena, para Supergirl. Era una enorme estatua de acero como lo es ella, alzando al vuelo, o eso era lo que Lena me mencionó al teléfono, invitandome a la presentación, ya que le había comentado que mi hija era una gran fan de la heroica.

Cómo era de esperarse de una niña, Ruby y su entusiasmo no tenía límites. Bajo del auto con un paso acelerado, prácticamente corriendo hacia el muelle donde sería la presentación. Cuando justo en ese momento chocó imprudentemente con una mujer, y siguió de paso, sin detenerse a pedir disculpas apropiadamente.

- ¡Oye ten cuidado! - Dijo la mujer de cabello cortó y pelirrojo, a la niña.
- ¡Ruby, cariño! - La madre de la niña siguió a su hija, y volteo a ver a la mujer, apenada con ella por la actitud de su hija. - ¡Ven aquí linda!, ven...- hizo el ademán con su mano para atraer a su hija. Acercándose a la bella mujer con chaqueta de cuero y de aspecto algo rudo. - Esa no es la forma de pedir disculpas...- Indico la madre, esperando una mejor respuesta de la parte de la niña.
- Lamento haber chocado con usted - Se disculpó la niña. La mujer de semblante serio, se relajo y sonrió amablemente.
- Está bien, no hay problemas y gracias por disculparte. - Dijo amablemente la pelirroja.
- Mamá, ¿Puedo irme ya? Quiero estar cerca. - Rogó la niña a su madre.
- Está bien, pero no te alejes tanto, quiero tenerte a la vista. - Le indicó la madre a su hija, antes de esta se fuera nuevamente.
- Tu hija es muy divertida. - Comento la pelirrojo. Ante lo dicho Samantha sonrió y suspiró.
- Gracias. Solo intento disfrutar el micro segundo que aún tengo, antes de que se convierta en una adolescente. Adiós. - Agita su mano, despidiéndose de la mujer.
- Adiós. - Se despide amablemente.

Era extraño pensar que una chica de aspecto rudo y serio, ¿Pondría tener una bella sonrisa?, Tal vez el sol me estaba haciendo daño, al pensar en esas cosas.

Encontré a mi hija en medio de la multitud, no había ido tan lejos después de todo, encontró la posición adecuada para ver la presentación. Y ahí estábamos viendo como Lena presentaba la estatua gigantesca y muy bella de la chica de acero. Había hecho un excelente trabajo junto con Lena para sacar a los daxamitas de la ciudad. Eran mujeres dignas de admirar. Me preguntó si....Nah, no lo creó. ¿Una Luthor y una Super siendo pareja?, Eso sería un milagro.

Lena estaba dando sus últimas palabras, cuando un enorme estruendo se escuchó y la tierra empezó a a sacudirse horriblemente, por inercia a la hora de escuchar el estruendo todos se agacharon, pero los procedimientos de simulacro ante un ataque se fueron al caño. La gente empezó a correr despavoridos de un lado otro, y cuando menos sentí mi hija ya no estaba conmigo. Ruby se había separado y no estaba conmigo. La llamé afligida. Nada. No estaba.

Un segundo estruendo se escuchó, y la tierra empezó agrietarse. Los cristales de los edificios reventaron, hiriendo de gravedad a muchas personas. Le pedía a Dios que mi hija no estuviera ahí cerca. La buscaba desesperadamente entre la multitud. Gritaba su nombre en busca de su respuesta. Nada. Corría por todos lados, abatida, imaginandome lo peor. No. No podía pensar en eso, era mi hija, lo más valioso que tengo. No podía perderla, no a ella.

El tercer estruendo, sacudió todo nuevamente. Haciendo que algunos cayeran al suelo, incluyéndome claro, golpeando mi cabeza fuerte contra el pavimento. Por suerte no perdí el conocimiento, pero si estaba desorientada. Por un momento dejé de escuchar todo. Solo era murmullos, pero logré captar lo que quería. La voz de mi hija. Llamándome. Sollozando del miedo. Con dificultad logré pararme y seguir únicamente la voz de mi hija. Al verla debajo de la torre de iluminación, que había caído sobre ella, me aterrorice y corrí a auxiliarla. Trate de levantar el pesado metal pero no logré ni moverlo, mire desesperada a todos lados, grite pidiendo ayuda. Nadie respondió a mi llamado, todo estaba fuera de control.

Mi hija lloraba, quejándose del dolor. de igual forma yo también lloraba, no sabía que hacer o cómo mover esa cosa de ensima. Una vez más intenté hacer fuerza, logré moverlo al fin un poco, hice más fuerza aún; tanta que hundí mis dedos en el metal, aboyandolo, pero logrando al fin apartar la torre de iluminación y salvar a mi hija.

En ese momento, me aferre a mi hija con fuerza. Un gran alivio al sentirla entre mis brazos una vez más. Nunca antes había visto la muerte tan cerca, pero no logró arrebatar a mi hija. Ella se aferraba tanto a mi lloraba como nunca antes lo había hecho e igual de la misma forma yo también. En un momento dado, reaccione y observé mis manos con detenimiento, desconcertada ante la fuerza sobrehumana que adquirí, casi igual a la de....No. Eso es imposible. Era la adrenalina seguramente.

Luego sin separarnos nos incorporamos nuevamente, observamos a nuestro al rededor. Todo se había calmado. La pregunta era, ¿Donde estaba Supergirl? La habia visto un breve instante en el aire, pero la perdí de vista. Todos observaban al mar expectantes. La gente murmuraba y logré escuchar que se había sumergido al mar profundo, y que llevaba 10 minutos, sin salir a la superficie. Muchas preguntas surgieron en mi cabeza, pero eran todas inrrelevantes en ese momento. Mi hija al igual que todos estaban preocupados por su heroína, yo también lo estaba.

Hasta que el oleaje empezó a golpear con fuerza los barcos estacionados en el muelle y azotando las paredes de este mismo. Lo que sucedió después fue tanto sorprendente como aliviador. Supergirl estaba sostenido sobre sus fuertes brazos un enorme y largo submarino, en el aire, sin ningún esfuerzo. Esa era la causa del ataque y ella había logrado detenerlos y salvarnos una vez más. Era realmente sorprendete y digno de admirar.

Gracias al peor susto de nuestras vidas. Ruby y yo nos fuimos directo a casa, por fortuna no recibimos daños, así que fuimos directo a casa en vez del hospital. Me preocupaba mi hija, pero insistió en que estaba bien. Que era igual de fuerte que Supergirl. Esa niña era igual que yo a su edad, admirando un Súper.

Me despoje de mi ropa que estaba todo sucia y me dispuse a relajarme en mi cama. Inmediatamente caí en coma gracias a morfeo. Pero como eso de las 2 de la mañana me desperté de golpe. Sudando. Había tenido una pesadilla; supongo que era normal después de pasar lo que pase con mi hija en la tarde.

Pero nunca pensé que eso sería una precuela del horror que se avecinaba.

Y nunca me imaginé que más adelante en el futuro, me volvería a involucrar nuevamente con aquella mujer del muelle.










To be continue...
__________________________________________

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 14, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dawn of JusticeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora