RAINBOWS -EVAK-

eight

solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos.   -El principito

Era sábado y Maldita sea, esta más que decidido que iría a casa de Isak e irían a algún lugar, ese pequeño chico se había convertido en su amigo con solo verlo dos veces, era tan inocente, tan puro.

Buscaba sus llaves por todo su departamento, era un asco, aún que tenía unos dias que el él se sentía  un poco re-animado no había escombrado su departamento en meses, habían fotos, papeles, ideas plasmadas en más papel por todo el departamento, parecía una pocilga, talvez después buscaría.

Encontró por fin sus llaves en un sofá y se dispuso a salir.

Hacía frío lo cual le encantaba, pero le gustaba más cuando había nieve.

Llegó a la casa de Isak y no sabía si tocar o correr de regreso a su hogar y deprimirse hasta dormir, si, así de cambiante era su ánimo.

Pero antes de tocar abrieron la puerta

-Hola -Dijo la pequeña-¿ Buscas a Isak?

-¿Como sabes que estaba aquí? -Fue lo primero que le llegó a la cabeza-

-Oh, escuché tu respiración, y también estaba viendo por la ventana -Dijo indiferente la niña- Es aburrido estar aquí encerrada

- Em, ¿Esta Isak?

- Claro, es más que obvio -Dijo la niña girando los ojos- ¿Quieres pasar?

-¿Tu mamá está de acuerdo con que pase?

    Sabía que era una pregunta tonta ya que la primera vez que fue lo dejo sólo con sus hijos, y el apenas y los conocía

-Ella está trabajando pero ya te dejo entrar una vez, así que puedes entrar -Dijo abriéndole la puerta-

El entró y después de el la niña

-Le hablaré a Isak, esta en su curato, el siempre está ahí es como ermitaño- Dijo la niña entrando por un pasillo-

Esa niña hablava demasiado, era agradable, aún que no estaba muy acostumbrado a la gente así.

Volteó hacia el pasillo y ahí está el pequeño chico con una gran sonrisa

-¿Even? -Dijo el chico llegando a la sala-

-Isak - Dijo Even mientras se ponía de pie para abrazarlo- ¿Como estas?

-Bien, no sabía que vendrías -Dijo contento- como na habías llamado

- Lo siento, estaba algo ocupado - Dijo un tanto apenado- pero estoy aquí para que vayamos por un café o algo a la plaza, ya sabes dijiste que querías salir

A Isak inmediatamente se iluminó su rostro pero a los pocos segundos se puso serio

- Me encantaría, enserio. Pero no esta mi mamá y Valentina no se puede quedar sóla -Dijo triste- Lo siento.

Eso había hecho que Even igual decayera un poco. ¿Enserio había cido para nada?

-Emm, ella puede venir con nosotros.

¿QUÉ ESTABA DICIENDO? -Gritaba su subconsciente-

-!SIII¡ Voy por mi sudadera -Grito la niña desde el otro extremo de la sala-

Isak enserio quería ir, pero no tenía dinero, su madre le había dejado un poco pero no era suficiente

-No Even, mejor otro dia, no cuento con mucho dinero pero podré juntar y ahora si vamos -Dijo tratando de converser a Even-

- No necesitas dinero, yo te estoy invitando -Dijo tomando su mano- Ven te acompaño por un suéter

Una vez que los dos hermanos ya tenías suéter salieron de la casa, Even enserio no sabía lo que había hecho, tanto tiempo sin salir y ahora iba con  un chico lindo y  una niña hiperactiva, como no habían el bastón de Isak, este iba tomado del brazo de Even. La plaza no estaba muy lejos, así que ese pensamiento lo hacía no entrar en pánico por tener que cuidar dos personas

-Amo cuando hace frío, también cuando esta a punto de llover, huele a tierra mojada, amo ese olor -Dijo isak derrepente-

Ahí era cuando admiraba a Isak, que a pesar de no ver, apreciaba las pequeñas cosas que los otros no les tomábamos importancia, esas pequeñas cosas que no se necesitan ver para amarlas.

-¡Oh no¡ no digas que está apunto de llover porque no tenemos sombrilla y mi suéter no tiene gorra, ni el de Valentina - Dijo Even-

-Es que enserio huele, siente el olor, siente la brisa que golpea tu rostro -Dijo Isak- eso indica lluvia

- Y también las nubes lo indican, son grises -Dijo Valentina señalando el cielo-

- Entonces creo que deberíamos de caminar más rápido antes de que llegue la lluvia y su madre me golpee por causar que sus bebés se enfermen

Y eso hicieron caminaron rápido, cuando llegaron, compraron y se fueron a sentar

- ¿No tienes más amigos? -Pregunto derrepente Valentina-

- Emm, mi mejor amigo se fue del país hace un par de años y no soy muy social -Respondió Even-

- ¡Oh! Y ¿tienes novia?

Even no podría dejar de pensar que esa niña hacía preguntas muy incómodas

- No -Dijo seco even-

Cuando Isak escucho esa respuesta, comenzó a sentir algo raro es su estómago, algo raro.

-Bueno, vamos a su casa antes que empiece a llover -Dijo Even levantándose- Valentina agarra a Isak

Salieron de la tienda y comenzaron a caminar y comenzó la lluvia

-Gran suerte que tenemos -Dijo Even-

Y no sólo era una lluvia normal, era mas que eso

-Llegaremos empapados -Dijo Valentina-

- ¿Quieren que tomemos un taxi? -Pregunto Even-

-¡NO! -Gritaron los hermanos al mismo tiempo-

-¿Sabes cuanto tiempo tiene que no siento la lluvia? - Dijo valentina- Es hermoso cuando llueve

-Pero esto es un diluvio, no una simple lluvia -Dijo Even serio-

Isak sólo reía de la pequeña pelea que tenían Even Y su hermana

-Por favor Even, caminemos -Dijo Isak en modo de súplica-

-Esta bien, pero agárrate bien de mi -Dijo Even mientras entrelazava el brazo de Isak con el suyo-

Y Isak no podía estar más feliz, había tomado café, había salido, habia sentido la brisa y la lluvía en su cara, había olido la tierra mojada y estaba con Even, no podía pedir más.

Nota: Es corto pero es lindo