Little Love [ WinkDeep]

Capitulo 9: Embarrassed

Ya había pasado una semana de salir oficialmente con JinYoung, y JiHoon tenía que decir que se sentía el chico más feliz del mundo. Jamás pensó que el menor podía ser más dulce y atento con él. Todo era mejor de lo que alguna vez se imaginó, JinYoung solía ir a su casa muy temprano por la mañana para ir a la escuela con él, a pie, la excusa perfecta del menor era que quería pasar más tiempo con él, además en el bus no podía besarlo las veces que quería.

En la escuela el caso no era distinto, JinYoung esperaba por JiHoon en la puerta de su aula, una vez que la campana de receso sonaba, para llevárselo a la azotea a comer. Jaehwan se había quejado varias veces con el menor porque estaba quitándole tiempo de calidad con su amigo, Jaehwan se sentía traicionado por su amigo que no decía nada cada vez que JinYoung venía y se lo llevaba de la mano.

Jamás debí ayudarlos a estar juntos si me ibas a dejar de esta manera JiHoon ― gritaba Jaehwan mientras veía como su amigo se iba con JinYoung riéndose. Estos dos estaban completamente enamorados.

Y bueno después de clases, JinYoung esperaba en el paradero del bus por JiHoon y se iban juntos a casa, todo esto gracias a la ventaja de vivir algo cerca. Prácticamente todos sus días eran sólo ellos dos. Y ninguno de ellos se podía quejar.

Fue un lunes cuando JinYoung le envió un mensaje de texto a JiHoon diciéndole que no iría a clases debido a que iba a salir con sus padres. El castaño suspiró más aliviado después de leer el mensaje, se había preocupado cuando el reloj había marcado las siete de la mañana y JinYoung no aparecía por su casa, a JiHoon no le quedó de otra que coger su mochila e irse esta vez a la escuela sólo.

Ya cuando llegó a la escuela se encontró con un muy sonriente Jaehwan sentado ya en su lugar, este lo miró curioso y luego sonrió.

― Y ¿dónde está JinYoung?

― Hoy vine solo — respondió el castaño tomando asiento, colgó su mochila detrás de su silla.

Jaehwan lo miró aún más curioso, no se lo podía creer, desde que su amigo había empezado a salir con JinYoung parecían chicles, se levantó rápido de su asiento y corrió hacia la puerta para confirmar lo que su amigo le había dicho. Y así fue. No había rastro de JinYoung por los pasillos. Soltó un silbido.

― ¿Han peleado? ― preguntó cuando llegó de nuevo a su lugar.

― No ― respondió el castaño, se recostó sobre su pupitre cansado. Anoche no había podido dormir bien debido a que su mamá se le había ocurrido la grandiosa idea de invitar a algunas de sus amigas del hospital a su casa. La casa había estado llena de risas demasiadas fuertes que impidieron que pueda dormir bien. Bostezó y su amigo pasó su mano por la espalda del castaño.