Ojos Tristes.

226 21 6
                                    

"¿Quien soy? Da igual, ustedes me conocen perfectamente; incluso puedo decir que lo hacen mejor que yo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"¿Quien soy? Da igual, ustedes me conocen perfectamente; incluso puedo decir que lo hacen mejor que yo."

Soy el hijo menor de la familia Katsuki, justo ahora estoy por salir con mamá a una más de mis consultas. Caminábamos hacia el sitio, mientras lo hacíamos observo el rostro de mamá, ella esta intranquila, no me gusta ver a mamá así. -¿Que pasa?- Pregunto preocupado.

Mamá me observa, su mirada luce mucho más tenue de lo habitual, ella contesta: -No te preocupes por mi cariño... Estoy bien- ¿Porque mamá miente?, me pregunto para mi mismo, ella claramente no esta bien y el no saber que es lo que la mortifica hace que ellos se molesten conmigo.

Al llegar mamá suelta mi mano, ella tiene que ir a otro lugar, debo de ser un buen niño y esperar a mamá en consulta. Ella se aleja de poco, hasta irse de mi visión y yo camino al interior del local, al hacerlo observo muchos juguetes regados en todo el piso, todos y cada uno de ellos lucen coloridos, a Yurio no le gusta jugar con ese tipo de cosas, por lo general el y yo jugamos con objetos punzantes o de vez en cuando filosos.

Sin más remedio me siento en medio de la sala de espera, tengo que ser un buen niño y esperar a ser llamado por la ayudante de la señorita Minako, a diferencia de ella, Minako es genial y agradable, a Guang no le desagrada ya que siempre huele dulce, como un pastel.

- Yuuri, Minako te espera dentro - La llegada de ese horrible monstruo hace que la voces se enfaden, no me gusta para nada que se pongan de esa manera, me gritan muchas cosas malas cuando estan molestos. - Detenté, ¡Detenté por favor!- Mis suplicas son en vano, coloco mis manos en mis canales auditivos, sigo escuchándolo, repetidas veces golpeo con fuerza mi cabeza, apenas puedo divisar el rostro de la chica, esta asustada. Obscuro, todo comienza a tornarse obscuro, me detengo, por alguna razón no puedo sentir mis piernas; giro la mirada a la derecha, Minako esta a mi lado, enterrando una jeringuilla en una de mis piernas.

Inevitablemente el cansancio me invade, lo único que alcanzo a escuchar es la voz de Minako decirme que descanse.

Las horas pasaban, el sol se escondía poco a poco, bañando el cielo de un hermoso color ámbar, con lentitud mis ojos se abren, todo lo que observo es borroso, tallo mis parpados un poco para recuperar nuevamente la visión. - Finalmente despiertas Yu- Minako de encontraba sentada detrás de su escritorio, un olor agradable impregna mis cosas naaales, era incluso mejor que el olor de Minako; Si quererlo mi apetito comienza a abrirse.

Me levantó, posterior a eso me acomodo para quedar sentado; al hacerlo mi cabeza comienza comienza a doler, cierto mis ojos y poso una de mis manos sobre mi frente. El dolor comienza a desaparecer poco a poco. Luego de un rato me percató del sitio en donde estamos, la sala de terapia o como lo llamaba Guang: Cruel Pesadilla. -¿Qué fue lo que paso ahi afuera?- Minako se hacerca, en su mano derecha sostiene una taza y debajo del brazo su libreta de apuntes. Su mano de extiende hacia mi junto con la taza, ¿Acaso era para mi?.

Piezas Perdidas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora