El comienzo

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Lindsay era un niña de no menos 7 y no más 9 retraída hasta para aclarar esa duda, de ojos cafés claros que parecían atrapar la luminiscencia del sol cual hojas capturando un rayo, de un color sutil café y unas distintivas manchas en su rostro, justo bajo sus ojos y no eran lunares, con su cabello riso pero liso, rojizo y aún más café . Su madre el ser biológico que para su tragedia le habría brindado vida aun sin ella pedirlo y luego conduciéndola a un lugar que nadie conoce y del cual nadie suele regresar, una mujer a quien los años no habían golpeado para mal al contrario de su hija ella tenía los ojos del color más negro que la tierra haya podido ver, parecía nieve, con las pecas que le habría heredado a su hija y aun cabello libre encerrado en un tono sol.

Atada su madre a un sujeto de aspecto desagradable que no era feo pero si vomitivo, de una mirada seca y hostil, sería de aquellas personas de las que dudamos desde un principio un personaje al que poco le importaba la vida, si tan solo se pudiese llamar vida a una serie de actos como respirar, dormir y comer , un vividor igual o peor a una sanguijuela que sobrevivía de lo que les quitaba a sus múltiples parejas , ya que debió pensar que su compañía era demasiado para toda ellas , su nombre era Bob , ¿Qué podemos esperar de una entrada así?

Lo que pasa cuando nos quitan la InocenciaWhere stories live. Discover now