Confessions (Jimin Y Madonna)

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Era una tarde fría en Busan cuando Park Jimin estaba yendo hacia sus clases de baile. Era su pasatiempo y forma de olvidar millones de problemas que bombardeaban en su cabeza.

Le costaba despejarse ya que cada vez que volvía a su casa habían más problemas. Su familia no pasaba por buenos momentos. Falta de comida, dinero, incluso que lleguen a cortarles la luz por adeudar la factura.

Al llegar saludó como siempre a su profesor y amigo, Jung Hoseok, quien como siempre lo recibió con una sonrisa en su rostro.
El sueño de ambos siempre ha sido ser bailarines reconocidos; ambos confiaban en sus habilidades.

-¡Hola ChimChim! ¿qué tal estás hoy?- le preguntó Hoseok.

-Más o menos Hobi, no he comido nada porque debí darle mi almuerzo a mis hermanos. -respondió triste- Cada vez tenemos menos dinero, mi madre no puede con todo sola y seguramente deberé comenzar a trabajar para ayudar a mi familia.

Y así era. El padre de Jimin lo abandonó a él, a sus dos hermanos y a su madre. Desde hace 2 años que no ve a su padre e intenta borrarlo de su mente. Sabe que le hará mal pensar en aquél hombre.

-Tranquilo -dijo- si quieres puedo darte algo de comida y después comenzar la práctica.

-Está bien.

-

Se sentaron y mientras Jimin comía decidieron que sería buena idea prender la televisión.

Pusieron el noticiero, y se quedaron escuchando lo que decía aquella periodista.

-Hoy la cantautora estadounidense Madonna anunció que estaría abriendo las audiciones para reclutar buenos bailarines que la acompañarían en su próxima gira "Confessions Tour".

Posteriormente, la mujer mencionó datos de su nuevo disco y como había impactado en la industria de la música, algo que ambos de los chicos no prestaron atención. Solamente les importó una cosa.

La audición.