Saory

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..A veces las chicas se sienten solas, agobiadas por las cosas que les rodea. Siempre hay una familia que no es ejemplar, que no se ve como una familia normal.

Un día normal de 1997 nació una pequeña niña, eran tan hermosa como su madre, sus ojos se tornaban a un rojo carmesí intenso, el doctor que realizo el parto desconoció la causa. Ya que ninguno de sus padres tenía ese tono de color en sus ojos y mucho menos algún familiar lejano. Ya bastante tiempo se les veía los primeros dientes de leches, lamentablemente los padres no aceptaron lo que vieron, sus dientes eran diferentes a los demás, parecía dientes de sierra, son afilados.

-Doctor, debe de haber una explicación lógica para esto.- Dice de la madre de la pequeña niña, tocando el brazo de su marido que está a su lado como soporte, no entendía lo que pasaba con su hija.

-Lo siento señora Seick.- dice el doctor acomodándose detrás de su escritorio negro.

-¡Saory!- grito su madre indignada.

La niña voltea al escuchar su nombre sus ojos rojos muestran felicidad absoluta, y suelta una sonrisa, deja una muñeca con que estaba jugando en el suelo y se dirigí donde su madre la estaba llamando. Ella camina poco a poco donde está su madre y le tironea de la falda que caía en la pierna de la mujer mayor.

-¡Mami! ¡Mami!- La pequeña niña al fin dijo sus primeras palabras, se notaba tan alegre, llena de felicidad, como toda niña llena de energía.

-No soy tu madre...-Dijo su madre aterrada por escuchar esas simples palabras de su boca, no podía controlar ese sementino de desagrado hacia esa niña, ya que no consideraban su hija.

Los días pasaban cada vez más rápido, la pequeña Saory, ya tenía 5 años era feliz corriendo, jugando con sus muñecos. Pero un día inesperado escucho una pequeña conversación que tenían sus padres.

-Hoy es el día ¿no es así?- dijo el padre de la pequeña niña, este estaba sentado en un sillón de una sola persona leyendo el periódico.

-Si... hoy.- La mama de la pequeña no dijo más nada, estaba preparando un pastel de cumpleaños para su hija, estaba echando una sustancia que la niña desconocía, se asomó un poco más y cayó al suelo, dejando mostrarse frente a sus padres. No prestaron atención al asunto, solo la miraron de reojo. Sus cabellos rojos están sujetos a una cola alta.

-Mami...- dijo la pequeña Saory levantándose del piso alfombrado. Ella esperando que su madre la ayudara pero nunca sucedió.

-Say... Tenemos que hablar...-dijo su madre acercándose a ella.

-Sí, mami.- La niña sonrió y se sentó en el comedor, su casa es bastante grande tiene dos pisos, pero para la niña era mejor quedarse en la planta de arriba con sus juguetes.

-Sabes que hoy es tu cumpleaños número seis - dijo su madre corriendo una de las sillas del comedor acomodando su vestido y sentándose de frente a su hija. Como una cintura como Saory se podía parecer a sus padres, el físico de su madre era tan diferente; Cabellos negros largos sus mechones caían a la cintura, ojos del mismo color negros obscuros, rasgos finos, piel pálida, delgada, da una buena impresión a primera vista. En cambio su padre era una persona bastante común, estatura promedio de un hombre, cabellos castaños y ojos avellanas, trasmitía un aura bastante tranquila. Estas características no daban con el paradero de los rasgos de aquella niña.

Lo que Saory no recuerda muy bien fue lo que ha hecho sufrir a su madre y a su padre;

Cuando era más pequeña la madre la llevo afuera donde jugaba con sus juguetes, pero un día de esos, una pequeña ardilla roja pasaba a su lado, ella la sujeto del cuello y le mordió la cabeza, dejándola toda manchada de sangre, cuando la madre estaba dispuesta a llevarla a dentro, se dio cuenta de lo que había sucedido y se aterro al verla, ella acudió a su esposo, el solo dijo que era una etapa que por seguro fue un accidente. En otra vez, cuando la madre le daba leche materna, la hija le mordía los pechos eso hacía que le clavaron los dientes afilados que crecían rápido, la madre no aguantaba el sufrimiento, sangraba y sentía mucho dolor para seguirlo haciendo. Desde ese momento los padres de la niña la encerraron en una habitación con puerta de acero y con una sola ventana cubierta con una cortina negra todo eso era para que ella no hiciera más daño. ¿A caso es un monstruo?

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⏰ Última actualización: Apr 13, 2016 ⏰

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