[+18] My Beloved Bitch [The GazettE (REITUKI) (AOIHA)]

XIII - Damned Memories

Al abrir los ojos, Takanori se da cuenta que se encuentra en su cama y no en el sofá, donde recuerda haber caído en los brazos de Morfeo. Se lleva la mano a la frente para comprobar su temperatura, ya no tiene fiebre, pero todavía siente su garganta atascada debido a la mucosidad generada por su cuerpo de manera excesiva.

Se levanta frotándose el ojo derecho con su puño mientras un bostezo se escapa de su boca, al llegar al salón ve a Akira tumbado en el sofá con la manta, esboza una media sonrisa conforme se va acercando a él para taparlo un poco más, Reita se mueve en el sofá, por lo que Ruki se aleja de él para dejarle dormir todo lo que desee. Decide salir del apartamento, dejando la puerta abierta para no encerrar a su invitado, para bajar a coger el correo. Al vivir en un primero, no tarda mucho en llegar al portal, donde se encuentran los buzones. Tras abrir el buzón correspondiente a su apartamento, saca las cartas y las papeletas publicitarias, estas últimas las tira a la papelera en una esquina y luego se lleva lo demás arriba.

Mientras entra en el piso de nuevo, comienza a ojear las cartas. Muchas son facturas de la luz, del agua, etcétera, hasta que ve una carta que le llama la atención más que cualquier otra. No tiene sello y simplemente pone su nombre completo, no tiene su dirección ni ningún nombre escrito; el sobre está completamente en blanco menos por las palabras Takanori Matsumoto en una caligrafía muy elegante y sofisticada.

¿Cuál es el mayor problema? Que Takanori conoce esa caligrafía.

«No puede ser. ¿Cómo me ha encontrado?»

El joven cierra la puerta del apartamento con llave, se dirige a la cocina y se sienta en uno de los taburetes. Deja de lado las facturas y se centra en aquella carta cuyo remitente es desconocido, al abrirla se encuentra con un folio muy fino, completamente blanco, una carta escrita con la misma caligrafía que hay en el sobre. La persona que la había escrito lo había hecho de la mejor manera posible, dejando margen y sin ninguna señal de corrector o tachones por algún error a la hora de redactarla.

Takanori traga saliva mientras se levanta para coger un vaso y llenarlo de agua, luego se sienta de nuevo, nervioso, y comienza a leer la carta.

Querido Taka,

Ya has comprobado que no has podido librarte de mí. No me ha sido fácil encontrarte, pero por fin lo he hecho, y esta vez no te me escaparás.

Como ya has podido comprobar también que sé dónde vives ahora, pues en el sobre no he escrito tu dirección porque yo misma eché esta carta en tu buzón. También sé que el día de anteayer estuviste con tu querido amigo Kouyou y con otras dos personas. El lugar en el que trabajas todavía es desconocido para mí, pero ten por seguro que lo averiguaré, cueste lo que cueste.

Ahora comprendo que fui una estúpida al dejarte de esa manera, sobre todo porque lo hice por algo que no ha merecido la pena al final. Ryotaro no me hace caso, no me satisface, mi matrimonio es una mierda, y no pienso quedarme sentada mientras tú te follas a otras mujeres como me follabas a mí.

Quiero verte. No me importa dónde o cuándo, pero quiero verte para hacerte el amor de nuevo. Caerás ante mí, Takanori, conozco tus debilidades. No te desharás de mí tan fácilmente. Cualquier día me presentaré en tu puerta.

Te desea y te ama,

Yuka Hanazawa

P.D: Akira no tiene por qué saber nada, ¿no? No tienes excusa para no hacerlo.

Al leer todo el contenido de la carta, Takanori sólo puede tragar saliva, asustado y preocupado. ¿Cómo puede saber ella dónde vive después de que se cambiara de ciudad? ¿Cómo puede tratarle de esa forma después de lo que ocurrió entre ellos? Pero, más importante, ¿por qué conoce la existencia de Akira?