La gota que derramó el vaso.
El día de mi cumpleaños número 17 estaba tan feliz, quería compartir contigo pero al parecer tú no. Te la pasaste toda la noche chateando con quién sabe quién y cuando te pregunté solo respondiste “con nadie importante cariño” fui tan ingenua, ni siquiera dudé un segundo de ti, si me decías que nadie importante yo te creía que no era nadie importante. Dos días después me confesaste por error que estabas chateando con otra chica y que de hecho estaban jugando preguntas calientes y por eso no me prestaste atención en toda la noche.
No siendo eso suficiente un día estábamos en mi casa e invitaste a una "amiga" tuya que resultó siendo la misma de mi cumpleaños ¿Cómo pude ser tan imbécil? Debí dejarte en ese momento, me estabas restregando a otra en la cara.
Tres semanas después me armé de valor para dejarte, no pensaba soportar más tus desplantes así que un martes en la mañana te busqué, te besé con todas las ganas, el amor y el odio del mundo, te dije que lo mejor era que dejáramos las cosas hasta ahí. Te enojaste, me gritaste, me dijiste que me odiabas y que jamás me ibas a perdonar, a pesar de todo me sentía libre, ese día hice todas las cosas que dejé de hacer durante 14 meses por estar detrás de ti y de tus inmadureces.
Eres el amor de mi vida pero también lo peor que me pasó. Te amo y te odio. Siempre y nunca tuya.

ESTÁS LEYENDO
11 Razones.
Short Story11 razones para no enamorarse de él, todos me advirtieron pero quise correr el riesgo. "El que no arriesga no gana" Es la historia del amor o tal vez el error de mi vida, disfrútala.