Mirarlo dolía.
Contemplar la forma en como lo golpeaban; puños llenos de furia que se estrellaban fuertemente contra su débil cuerpo; patadas tan fuertes como si estuvieran pegándole a un balón, sin preocuparse si se llegaba a romper. Observar esa escena le provocaba un escalofrío y los peores pensamientos se adueñaban de su mente.
En aquellas acciones podía ver a un pobre chico siendo maltratado por alguien dos años mayor que él. Aquel típico joven problemático desatando su furia en alguien inocente. La típica víctima que no tiene la culpa de nada.
RenJun observaba con tristeza e impotencia como el chico descargaba los puñetazos y patadas contra su mejor amigo y éste intentaba protegerse inútilmente de los golpes, maltratos e insultos.
RenJun era incapaz de moverse debido a que un chico lo sujetaba por detrás, teniendo como prisionero sus brazos y obligándolo a observar la escena.
RenJun se sentía inútil, débil e impotente al no poder hacer más que contemplar el sufrimiento de su amigo y aquello ocasionó que se sintiera patético y tuviera lastima de sí mismo ya que... Podía tratarse de él.
RenJun consideró la posibilidad de que él fuese la persona que ahora mismo estaba en el suelo soportando cada golpe e insulto pues, tanto él como ChenLe, tenían tantas cosas en común como, por ejemplo el lugar donde provenían.
Ambos chicos eran de nacionalidad china pero por diversos problemas se mudaron a Corea del Sur. La diferencia era de que RenJun se había mudado años antes que su mejor amigo y también los diferenciaba la forma en cómo se relacionaban con los demás.
RenJun, en el primer momento que llegó a Corea, hizo todo lo posible para aprender el idioma. Entabló amistades con personas que podían ayudarlo e incluso defenderlo si era necesario pero ChenLe... Él cayó en las manos del diablo.
ChenLe era lo opuesto a RenJun. No era sociable, no hizo lo posible para tener algún amigo y, siendo honestos, era un blanco fácil para los brabucones.
Un chico de cabellera rubia con movimientos torpes o incluso tímidos; siempre llevaba en sus manos un aparato―motivo por el cual se burlaban de él―pero aquel objeto se trataba de un traductor para poder comunicarse con los demás. Sólo era cuestión de acercarlo a sus labios, pronunciar en su lengua nativa lo que quería decir, esperar unos minutos y listo. Se tendría una traducción en coreano de lo que ChenLe quería decir.
ChenLe sólo usaba su traductor para comunicarse con profesores o nuestro tutor, muy de vez en cuando lo utilizaba para comunicarse con sus compañeros, pero en la mayoría de casos se limitaba a sentir y negar con la cabeza, o incluso decía palabras básicas y listo.
Los rasgos del chico tampoco ayudaban mucho y verlo solitario era el blanco perfecto.
― ¿Lo miras, RenJun? ― preguntó uno de los chicos que lo retenían.
RenJun hizo una mueca y bajó su vista para dejar de ver el sufrimiento de su mejor amigo pero el brabucón lo tomó de la barbilla bruscamente para que levantara la vista.
RenJun se mordía ligeramente el labio inferior mientras movía su cabeza para evitar ver bien pero el sujeto lo obligaba a seguir viendo, las lágrimas amenazaban con salir y aquello provocó que el chico riera.
― Mira, Lee ― decía a, lo que parecía ser, otro agresor ―. El pequeño RenJunie quiere llorar ― dijo mientras imitaba burlonamente el llanto de un bebé y fingía que se limpiaba las lágrimas.
Ambos jóvenes rieron mientras RenJun mordía sus labios para evitar llorar con mayor intensidad.
Sólo deseaba que el dolor se fuera. Que las burlas se hicieran menos y que dejaran en paz a ChenLe.
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Every Breath You Take.
Short Story«― ¿Por qué lo hiciste? ― preguntó ― No tenías por qué hacerlo. ― Tienes razón, no tenía por qué pero quise hacerlo. ― ¿Por qué? ― Porque no todos somos malos.» Donde ChenLe es molestado debido a su nacionalidad y Jisung sólo es una persona que qui...
