No confíes en ella

Capitulo 3

Desperté gracias a la alarma en mi celular, mire la hora, son las 7:00am y el vuelo es a las 11:00am, el chofer debe pasar por mi a las 8:00am para dejarme en el aeropuerto, así que me levante para arreglarme, me bañe, y me vestí con un outfit casual.

Luego de estar lista baje a desayunar, me preparé unos huevos revueltos con unas tostadas y un jugo de naranja. Tome mi mochila y le metí dentro un termo de agua, unos snacks, audífonos, mi cargador, un libro que estoy leyendo llamado where she went, mis papeles (pasaporte, identidad falsa..) y mi teléfono, suelo llevar bolsos así a cada viaje para entretenerme mientras espero en el aeropuerto. Cuando terminé de desayunar escuche mi teléfono sonar, era el chofer, contesté y me dijo que estaba afuera de mi casa para recogerme, tomé mis cosas y salí.
- Buenos días - dijo el chofer mientras tomaba mi maleta
- Buenos días- Dije mientras me dirigía al asiento del copiloto
- ¿Esto es todo? - Dijo al cerrar mi puerta
- Si, es todo - Coloqué mi bolso sobre mis piernas y me coloqué mis lentes de sol. Luego de cerrar el maletero, el chofer entró al auto y comenzó a conducir al aeropuerto sin decir palabra.
Llegamos unos 40 minutos después, me baje del auto con mi bolso y me dirigí al maletero a buscar mi maleta, me gusta que los chicos sean educados y me ayuden de vez en cuando, pero prefiero hacer las cosas sola, así que antes de que el chofer pudiera buscar mis cosas, baje mi maleta y comencé a caminar hacia el aeropuerto, entramos y fuimos a chequear las maletas, acá sigo siendo menor de edad, ya que tengo 18 y se es mayor a partir de los 21, así que por ende fui con mi " padre " o con el chofer, a entregar unos permisos de viaje falsos y luego entre.
La espera se hizo corta, nos llamaron a abordar el avión y fui de las primeras en entrar. Me senté junto con una niña que estaba viajando sola, tendría unos 10 años, saque unas galletas de mi bolso y comencé a comerlas.
- ¿ Me puedes dar una ?- pregunto la niña junto a mi
- Claro pequeña, ten - Le tendí mi bolsa para que agarrara una galleta
- Gracias, ¿cómo te llamas?- Mordió la galleta
- Me llamo Mía- Dije recordando mis papeles falsos - Mía James, ¿y tú? ¿ Cuál es tu nombre?
- Me llamo Melissa, que lindo nombre Mía- Dijo sonriendo
- Lo mismo digo - le devolví el gesto
Comenzó a sonar la voz de una aeromoza indicando que ya iba a arrancar el vuelo, tome mis audífonos y coloque mi playlist favorita de spotify, luego recosté mi cabeza. Desperté gracias a una mano en mi hombro, cuando abrí mis ojos vi a Melissa riendo, me quite los audífonos.
- Te has quedado dormida
- Al parecer sí - dije riendo - Gracias por despertarme, ¿cuánto falta?
- Justo por eso te he despertado, ya estamos por llegar
- Oh, de acuerdo - Guarde mis cosas en el bolso y me enderecé para el aterrizaje

Luego del aterrizaje y de bajar del avión, buscar la maleta fue rápido, pude salir rápidamente hacia la puerta en donde me esperaba mi " tío ", él tuvo que firmar un papel y luego pudimos irnos.
- ¿Cómo estuvo el vuelo? - Preguntó el chofer
- Nada mal siendo honesta, me he quedado dormida
- Me alegra que hayas descansado porque debes presentarte en la agencia lo más rápido posible, te llevaré a tu hotel, en donde debes prepararte para ir a la agencia, recuerda llevar tu currículum y los papeles necesarios- Volteo a verme - Mia- Dijo y guiño un ojo, luego siguió manejando
- Bien, y ¿como sabes mi nombre?
- Bueno me asignaron a ser tu chofer todo ese mes, debo saber algunas cosas sobre ti, ahora somos compañeros
- De acuerdo, ¿y cuál es tu nombre? - pregunté viéndolo
- Me llamo Nathan- dijo sonriendo- Un placer conocerte.. um.. ¿como quieres que te llame, Mía o Madison?
- Llámame Mia, prefiero acostumbrarme de una vez, si no es mucha molestia
- Esta bien
Llegamos al hotel, Nathan bajó mis maletas, lo observé un rato mientras lo hacía, no debe ser mucho mayor que yo, debe tener unos 23, es alto, cabello marrón, ojos claros, sonrisa perfecta. Un ruido me saco de mis pensamientos, la alarma del auto; entramos al hotel y Nathan habló en la recepción y le dieron dos tarjetas.
- ¿También te quedarás aquí?- pregunte tomando mi tarjeta
-Tengo que cuidarte ¿no?- dijo riendo
- Se cuidarme sola, no es mi primer caso - dije algo molesta
- Tranquila Mia, es broma, solo estaré en la habitación de al lado por si necesitas ir a alguna parte, recuerda que estas en otro país, acá es mejor que no conduzcas - Subimos por el ascensor y cada uno fue a su habitación.