Como sentimiento que soy, estoy algo indignado por como me describen pero ese no es el caso, ahora estoy aquí con mi más letal ¿enemigo?, el "miedo" y vamos a demostrar a las personas lo que realmente pasa cuando nos juntamos.
- ¿Crees que enseñar esto será lo correcto? .- susurra el miedo.
- Ellos siempre me culpan de su desamor. Pienso que merecen saber que no todo depende de mí, ¿no crees? .- dice "amor" - en fin, prosigamos.
Después de estar buscando un par de objetivos, encontramos a los ideales, esta pareja se aman pero por desgracia, solo una parte lo está haciendo bien. Hay que tener en cuenta que si lo insano no se corta desde la raíz, se acaba por expandir porque en este ámbito no existe la cura por más que se busque.
- ¿Percibes eso? No fluye en una parte .- pregunta "amor" a "miedo".
- No, y la verdad no sé qué hago aquí todavía. - deja caer "miedo".
- Cálmate y esperemos, que no tardarás en tener motivo. - alega "amor".
Hay muchas formas de amar y no lo voy a negar, pero aquel no es que no supiera como, si no que no lo hacía. Solo estaba ilusionando y ella amaba cada vez más, hasta el punto de olvidar la reciprocidad, que con el tiempo volvería a intentar recuperar.
- ¿No te sorprende? No la ama, solo quiere tener algo con que jugar y ella no se percata. ¿Cuándo lo verá?
- ¿Para ti eso no es lo de siempre? - pregunta Miedo. - si el amor tuviera forma física, seguramente me habría asesinado con la mirada.-
- Eso no es amor. .- sentencia.
La confianza es uno de los actos que más cuesta de recuperar si se pierde y él estaba lamentando la pérdida de su juego. Trató todas las formas posibles para hacerle creer a ella que la amaba con todo su ser y solo bastó cientos de promesas para que ella se convirtiera en el peor ciego que aquel que no quiere ver. Por desgracia, no todo vuelve a ser lo mismo y en ella estaban saliendo a flote ciertos sentimientos.
- Esto se está poniendo emocionante, ¿no crees? .- cuestiona burlón el amor.
- Sabes.. No, ehm.. ¿Y si le aburre? ¿o la cambia? .- pregunta desesperado el miedo.
- Lo que decía, muy interesante todo. Demuéstranos lo que puedes hacer ante el amor, mi querido.
Las peleas entre aquella pareja se volvieron más frecuentes y de mayor intensidad con el paso del tiempo. Lo peor es que mientras en ella se veía reflejado el dolor que le causaba tanto por celos como por las restricciones que comenzó a haber, la otra parte solo se distanciaba ocasionando más daños.
- ¿Cuando comenzarás a valorarte, mi señorita? .- piensa en alto el amor.
- Lo siento.. .- solloza el miedo mientras se instala en su cabeza.
Ella se había vuelto una alma atormentada, estaba sumergida por no decir que ahogada en la tristeza. Su miedo la obligaba a estar más cerca de la otra persona buscando cualquier excusa para poder tener un total control sobre esta. La otra parte empezó a arrepentirse de las promesas que le juró, aunque las palabras se las lleva el viento, dicen.
- Bien hecho, el "miedo". .- expresa el amor débilmente.
- Ni lo menciones. ¿A dónde te vas? .- pregunta el miedo.
- Dicen que el amor mata y solo yo he muerto. .- susurra poco antes de desaparecer.