Una sonrisa, un suspiró, una mirada y nada.
El tiempo es un cruel contrincante que te termina venciendo, te mira con superioridad y se rie de ti por tus malditas decisiones.
Tres meses y un día. Es menos de lo que he aguantado sin saber nada de ti, como te iba o qué hacías.
Pelo chocolate y una nube blanca de misterio ante el color de tus ojos, no me acuerdo y creo que es mejor. En cierto modo eso me ayuda a creer que estoy consiguiendo olvidarte.
Ahora te contaré cual fue mi estupida solución a todo. Alejarte, mentirte como me dije que no haría, ser un punto en blanco al final de la última palabra.
Es lo mejor, puede que no para mi porque aún lo siento, el mismo nudo en la garganta de cuando estaba decidida a alejarte. Perdoname por tomar una decisión por ti cuando no debería haberlo hecho.
No podía hacerme a la idea de que sufridas por mi culpa, pero, ¿Y ahora que no se ni cómo estas? Fue algo estupido y cobarde.
Así que te pido perdón mi Efimera Birdie, sigue adelante con tu vida sabiendo que, a quien dejas atras esta bien.
