cassettes | FHS

No.1 「Escucha」

Pov.Gold

— Golden, voy a pasar. —avisé para abrir la puerta de la habitación y encontrarlo apagando una grabadora algo vieja, pero por lo que veía funcionaba.— ¿Qué haces amor? —pregunté acercándome a él para abrazarlo.

— Nada, corazón. Sólo probando si funciona esta cosa, la encontré por ahí y quise probarla. —noté que estaba algo serio mientras sostenía la grabadora, lo que me preocupó un poco. Siempre sonríe sin falta, y más, cundo lo abrazo o le doy cariño.

— Cielo, ¿estás bien?. —pregunté finalmente, lo sostuve de los hombros para que me viera a los ojos, lo cual hizo. Reaccionó de la nada agitando su cabeza de un lado al otro para luego verme otra vez y sonreír.

— Sí, amor. —me dijo para luego abrazarme y darme besos en el cuello que, obviamente, eran con inocencia. Se separó lentamente con una hermosa sonrisa.— voy a preparar la cena, haré tu favorita, bebé. —aclaró con gracia, para luego, retirarse del cuarto a la cocina.

Logré visualizar un casette en la cama, me dije que no debía pero la curiosidad era más grande, agarre la grabadora y coloque el cassette para empezar a escuchar.

— ¿Ya está grabando? Perfecto! —era la voz de Golden, al parecer no sabía como evitar el que se guardara.

Hola, copo de nieve, espero que estés escuchando esto, aunque es obvio que lo estás escuchando, que bobo.  —no pude evitar reír un poco ante eso, cundo discute consigo mismo es adorable.

Hice estos cassettes por si algo me llega a pasar y dejó de estar a tu lado. Pero sí en estos momentos sigo contigo no seas metiche y deja esto dónde lo encontraste. — hice caso omiso y seguí escuchando.

Pero bueno, espero que te encuentres bien y que te estés portando como un niño bueno ahora que no estoy contigo. —¿porque diría eso?, la intriga me mataba así que puse mucha atención.

Cada cassette tiene algo distinto para cada vez que quieras aclarar algo, hablar conmigo, ya sabes, algún consejo; serán pensamientos míos.

Te amo mucho, mientras grabó esto tú estás en el salón grabando música para nuestra boda. Siempre quise esto, espero poder vivir esa gran experiencia de compartir mi vida contigo lo que resta de ella.

Me dijiste que harías la mejor canción de amor para mí. Que me haría recordar lo mucho que me amas, que sería tan perfecta como yo.

Espero que escuches todos los casettes o te iré a buscar en la noche y te jale los pies para darte un susto, aunque primero me quede a dormir un ratito contigo.

Me despido por ahora Gadiel Jeremías Thompson. Te amo. —sonreí un poco, pero siento un nudo en la garganta con la idea de perderlo y no poder verlo todos los días sonriendo con mucha alegría en su mirada, con sus labios entreabiertos y sus ojos color gris plata brillando como estrellas.

— Oye, amo... r. ¡Oye, deja eso ahora mismo! —gritó, se lanzó arriba de mí  lo que hizo que la grabadora cayera al suelo, y por suerte, intacta.— dime cuento escuchaste. —exigió una respuesta, su tono de voz era como si a gritos suplicará que no alla escuchado nada.

— Sólo el principio, me quedé en "Hola, copo de nieve" —mentí, era necesario, no quería que se enojara.

— Vale, te creo. Te hubiera matado si escucahabas más. — me amenazó mientras se levantaba. Aveces es exagerado, pero es lindo.— antes de todo esto, venía a decirte que hice carne empanizada con ensalada, sé que te gusta mucho. —canturreo para agarrarme de la mano y levantarme. Salimos de la habitación directo al comedor.

— Oye cariño, te amo. —le dije para antes de sentarnos a comer besarle todo el rostro, él reía un poco por los cariños al igual que yo, era agradable. Culminamos con un pequeño beso en los labios.

— Yo también. Pero es hora de comer. —dijo para irse a la cocina y traer la limonada que había hecho.

— Ya quiero que nos casemos... —susurre con emoción para sentarme y empezar a comer.

— Yo también —susurro de igual manera para luego imitar mi acción y tener una comida agradable como la mayoría de veces.

[722 palabras :') no sé hacer nada]