Vías para olvidar

Capítulo 2

Dos meses después de la fiesta.

Una muestra de compasión de misericordia eso es lo que busco, por favor no quiero escucharlo más, no puedo, no quiero.

Quiero que se callen esas voces, no puedo seguir resistiendo. Son demasiado alentadoras como para resistir su voz.

Muerete, eres desprecible, mereces que eso te hubiera sucedido a ti, desaparece de una puta vez. - promulgaban las voces en mi presencia, me lo decían las personas a mi alrededor hasta un punto que también me lo decía yo.

Las burlas seguían, y crecían cada vez más. Llegando a tal punto que las apuñaladas eran tan fuertes que me hacían llorar en cualquier lugar que me situara. Y cada vez el mundo donde residía se machaban de blanco y negro, y a veces de un rojo intenso.

Actualidad

Aquel momento en mi mente se repetía desde que Molly desapareció y fue ahí donde caí en la cuenta de que no tengo a nadie, a ninguno, nadie me respeta inclusivo a los que hice pasar por amigos - ya, viejos amigos-, echando la culpa de que su desaparición fuese por mi, pero no tengo a nadie a quien engañar, yo también pienso de igual forma.

Mi vida no podría ir mejor - irónicamente-.

Aquellos a los cuales tengo que llamar compañeros no paraban de meterse conmigo: escribiendo cartas amenazadoras con insultos añadidos, las meten en la taquilla para aparentar el anonimato, y a veces fueron mas lejos, llegando a pintar en ella.

La voz temprana dictando fin a una relación que corrompió, mis padres, se divorciaron. Su separación hizo que me perjudicara más que no aguantara más sus peleas - inclusive momentos antes de que firmaran los acuerdos de divorcio- estando continuamente discutiendo a gritos e incluso poniendo un muro entre ellos imaginario haciendo que ya no durmieran juntos.

Siguen viviendo juntos y todo por mi, porque lo estoy pasando mal desde ese entonces. Pero se divorciaron hace ya un mes, y me parece insoportable.
Los próximos días, semanas y meses están llenos de gritos agonizando provenientes de mi mente para que se callen, intentando no dar parte a los insultos de los compañeros que me suman a una destrucción eminente que puede acabar conmigo en segundo; y caigo de nuevo, me derrumbo, y me doy cuenta: estoy muy perdida sin ella.

Este sufrimiento me superaba con creces, tanto asciende que busco razones, suplicas que argumenten el anclaje a seguir la vida de los vivos en este mundo, pero son pocas las escusas y muchas más van contra.

Estoy cansada de respirar, de pensar, de sentir... Del dolor en el pecho que no me deja respirar. Estoy cansada de vivir. Pasan los días, sigo sin saber en qué día estoy o vivo, solo me inunda un inmenso vacío que no cesa por mucho que intente llenarlo. He intentado relacionarme una o dos veces pero la gente me ve como si fuera una persona horrible y despreciable, y por ahora, nos los culpo ya que en cierto modo lo soy.
Joder, dejé que Molly se marchara, ¡borracha! Y sin saber que hacía, me pregunto donde estará y que estará haciendo a diario, pero a estas alturas la gente piensa que ya no estará haciendo nada. Me niego rotundamente a aceptar que se ha ido,no no no. Eso nunca.

Sigo teniendo esperanza, de que volverá, de que no me dejará. No puedo ser tan débil como ellos y dejar que la idea de que ella ya no... esté, y fingir que es una desaparición como muchas otras.El tiempo transcurre de forma que: siga aumentando el acoso proveniente de mis compañeros, con intención de sentirme peor de lo que siento, de sentirme basura. Pero eso también lo hago yo, y mentiría al decir que no me siento así.

Tres semanas después de empezar el curso.

Llevo unos días que directamente no salgo de cama, poniendo de escusa a mis padres de que me encuentro con malestar, estos creyendo mis mentiras, sin saber como me dejan un poco de paz (algo a parte de su rutina diaria de hacerme presente en sus discusiones o motivo de ello)
Lo que yo llamaba acoso no es nada comparado  a lo que es ahora: frecuentemente llegan amenazas de muerte, escritas, dicha a espaldas (gritándolas) o de manera anónima por redes sociales; también muchos otros conceptos diciendo que desean mi muerte, insultando; e incluso me llegan notas amenazadoras escritas con palabras que me sorprenden y al mismo instante es como si algo en mi interior se rompiera en mil pedazos. Frecuentemente ponía: "Intenta fingir mejor, todos sabemos que escondes algo, ¿Donde esta el cadaver de Molly?"