Capítulo 4: La Cena

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Una vez llegamos al restaurante, hubo una bonita cena, Melissa se veia hermosa.
-Bueno, ¿ya puedes ir a dejarme a la casa de mi amiga?
-Claro, espera para pagar

No tenía dinero suficiente, asi que tuve que pedirle prestado a mi padre para pagar.

De camino a la fiesta, Melissa venia hablando por alguien por teléfono.
-¿Estarás ahi?
-...
-Esta bien, llega temprano y lleva la cerveza, adios cariño.

Espera... ¿Cariño?
¿Quien demonios era?

Cuando llegamos al lugar, Melissa bajo del auto y me pidió que entrara a casa de su amiga, ya que me tenia una bonita sorpresa.

Muy emocionado, entre a ver que era.
Sus amigos comenzaron a lanzar huevos, a mojarme de agua, y a llenarme de harina y polvo, mientras todos se reían insultandome.
-Melissa, que pasó? -le dije con lágrimas en los ojos-.
-Idiota, crees que saldría con alguien como tu?, -decia mientras se reía- cuando algún día seas alguien como Joseph, lo haré, pero aún no!
-¿Joseph?
-Si, Joseph, el mejor novio del mundo!

Yo, sorprendido, vi entrar al tipo que me molestaba. Maldita sea, que idiota fui esa vez.
-Oye chico nuevo, gracias por esto! - dijo Joseph mientras tomaba una foto-.

Me fui llorando al auto de mi padre, que tenia insultos en las puertas, hechos con pintura, me fui a casa lo mas rápido que pude.
Al llegar a casa, mi padre preguntó por la cena.
-Hey Louis, que tal la cena con esa chica?
-No quiero hablar de eso -dije con lágrimas en los ojos mientras entraba a mi cuarto-.
-Espera, hijo!

Cerré la puerta con llave, me sentía horrible. La decepción de esto, la horrible situación en la que me puso Melissa, tantos chicos y chicas riéndose de mi, fue horrible. Luego de eso, recibí un mensaje de Celeste.
-¿Que tal la cena?
-Tenias razón, ella no era buena...
-¿Que ocurrió?
-Pues, luego de-
-¿Sabes que? Voy a tu casa ahora mismo

Antes de que Celeste llegara, fui a ducharme para limpiarme, luego me vestí y volví a mi cuarto. Fue unos minutos después cuando mi padre dijo que habis alguien en la puerta, eran mis amigos: Celeste, John, y el resto.
-¿Que hacen aqui?
-Les dije que no estabas bien, asi que les dije que vinieran aqui para ayudarte - dijo celeste-.
-Sabes que nos tienes, hermano -dijo David-.
-Gracias chicos. Pasen, vengan a mi cuarto.

Traian pizza y refresco, todos habían venido para alegrarme. Aunque me sintiera tan horrible, no podia esconder la alegría que sentía.
Todos nos quedamos hablando hasta tarde, viendo películas y cantando como locos, ya que mi padre se habia ido. La noche había mejorado tanto...
-Oye Louis, tenemos que irnos -dice Robert- Tenemos asuntos que atender -dijo mientras le guiñaba el ojo a Celeste-.
-Esta bien, tu te quedas Celeste?
-El tiempo que quieras -dijo con una dulce sonrisa-.

Luego de que los chicos se habían ido, estuve a solas hablando con Celeste sobre la situación, cómo fue todo.
-Ya veo... ¿Y cómo te sientes?
-Pues, horrible. No se de que otra manera debería sentirme.
-Tranquilo, pero debes aceptarlo, tenía razón.
-Lo se, lo se.

Luego de un silencio, nuestros ojos se juntaron, y me sentí algo extraño. ¿Qué era esto?
-Louis...
-¿Si? -dije algo nervioso-.
-Tengo que decirte algo, es importante para mi decirte esto... -dijo en una voz suave y un tanto temblorosa-
-Dime
-Estoy muy en... Feliz de que seas mi amigo
-Yo también estoy muy feliz de que estes aquí conmigo, gracias Celeste.
-Me tengo que ir, lo siento -dijo con lágrimas en los ojos- Nos vemos luego.

Se fue rápidamente a la puerta principal, aunque la detuve antes de que se fuera.
-Celeste, se que pasa algo. Dime que es
-No pasa nada -dijo muy nerviosa-.
-Se que algo pasa, dime que es.
-Pues... Estuve enamorada de ti desde hace tiempo, desde que te conocí supe que eras un buen chico...

Eso era, nunca lo vi... Sus muestras de cariño tan especiales, su apoyo incondicional, su mirada, ¿cómo no me di cuenta antes? Me quedé en silencio ante la tal respuesta.
-Pero, ya encontrarás a alguien mejor que yo, alguien que te haga feliz -dijo con lágrimas en los ojos, mientras caminaba hacia la puerta-.
-Espera... Por favor.
-Esta bien -dijo Celeste, quien se veía triste y dañada-.

Se sentó en el sofá, yo cerré la puerta. ¿Le hice esto a alguien, sin darme cuenta de lo que tenia en frente?

-Celeste, lo siento... Perdón por no darme cuenta de las cosas
-No te preocupes -dijo mientras se limpiaba las lágrimas- cuando vi que estabas tan enamorado de Melissa, no quise decir nada, y abandone las esperanzas para ayudarte a conquistarla... Siento no ser como ella
-No eres como ella, eres mil veces mejor -dije mientras tomaba su mano- Perdón por ser tan idiota, no quise dañarte.
-Se que no quisiste, no es tu culpa.
-Lo es, y por eso me disculpo. No me di cuenta de las cosas. -dije mientras veia sus ojos, mi corazón se aceleraba cuando me veía-.
-Louis... Siento no haber sido útil con Melissa -luego la interrumpí, dándole un abrazo-.
-Tonta, no tienes que disculparte por eso.
-Esta bien... -dijo mientras devolvía el abrazo- Y sobre lo que dije, ignoralo.
-No, gracias.
-¿Eh? ¿Porqué? Solo fue una estupidez
-No es una estupidez. ¿Cómo voy a rechazar a alguien tan genial como tu? Me hubieras dicho antes y todo hubiera sido diferente.
-No quería decirte por Melissa -dijo, con una cara muy sonrojada-.
-Oye... Dame una oportunidad para pagar todos mis errores, los que cometí contigo, al menos.
-No tienes que hacerlo, tranquilo.
-Lo haré, aunque te niegues a aceptar -dije mientras veia sus ojos y tomaba sus manos-.

Ella, sonrojada, no se disponía a decir nada. Al parecer los nervios ls dominaban. Yo, sin darme cuenta que en realidad le sentía un cariño tan inmenso a Celeste, siendo cegado por la belleza inútil de Melissa, me dispuse a ser alguien bueno para Celeste. Cuando miraba sus ojos, podía sentir mi corazón acelerando, como me sonrojaba poco a poco.
-Celeste, tengo que decirte algo también.
-Dime -dijo ella sin quitarme la vista de mis ojos-.
-Estuve ciego por el físico de Melissa, y no me di cuenta de una cosa.
-¿Que cosa?
-Que todo lo que siempre quise, lo que siempre deseé, lo tenis enfrente de mi. No me di cuenta de esto que siento por ti, Celeste. Lo siento

Ella, aun en silencio, me abrazo con mucha fuerza. Yo devolví el abrazo, ¿porque me negué a esto que siento, y no vi lo que tenia?
-Dame una oportunidad -dije, con voz suave-.
-Claro que te la daré, idiota.
-Y no falta el insulto comun -dije mientras tenia una leve risa- Prometo hacer lo mejor que pueda para hacerte feliz.
-Solo con esto, me haz hecho la persona más feliz del mundo -dijo mientras me abrazaba- Gracias.
-A ti, Celeste. -dije mientras veia sus ojos-.

Nuestra mirada volvió a chocar, se sentía como un iman del cual no podía quitar la vista. Sentía como mis labios se acercaban lentamente a los labios de Celeste, cómo mi corazón aceleraba. Cerré los ojos automáticamente, y sentía el suave tacto de sus labios, y como mi corazón aceleraba cada vez más.
Fue mi primer beso, el beso que me dió una razón para hacerla feliz, tener un lindo futuro con ella.
Cuando abrí los ojos, no pude evitar ver las mejillas sonrojadas de Celeste, se veía tan tierna
-Bueno, me retiro ya -dijo Celeste con una voz temblorosa, se veía nerviosa y un poco entorpecida-.
-Quédate esta noche -dije con una actitud nerviosa-.
-Si tú insistes -dijo Celeste mientras tomaba mi mano e íbamos a la sala a ver otra película-.

A veces el amor viene de donde menos lo esperas, departe de un amigo o amiga. Es por eso que hay que esperar a la persona correcta, ya que puede ser algo inesperado y hermoso como en este caso

Continuará...

Gracias por leer mi historia! n.n
Debido a que esta es mi primera vez, me encantaría saber sobre su opinión y cosas que pueda mejorar, asi que su opinión vale oro para mi.
Gracias otra vez!

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⏰ Última actualización: Mar 30, 2018 ⏰

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