Les contaré un lindo cuento de hadas, el gremio se fundó por una chica con una pasión enorme por descubrir y vivir una aventura nueva cada día, con eso en mente se le nombró Fairy Tail en nuestro idioma hadas con cola ¿Las hadas realmente tienen cola o no? Es una duda eterna al igual que su aventura...
Tras años de su fundación se destacó por magos fuerte y nobles pero sobre todo por su manía por hacer líos en cualquier lado y divertirse sin importar que, un día el mago más fuerte trajo al gremio a una hermosa chica, solía ser muy ruidosa y enojona, pero siempre tenía una sonrisa para dar y el valor para sacrificarse por sus amigos, rápidamente todos se encargaron de protegerla y tomarle cariño, en especial cierto pelirosa, junto a ella las aventuras siempre iban acompañadas de risas, aún en momentos difíciles ella siempre estaba a tu lado y daba todo de si, era una mujer estupenda, nadie imagino que tras una peligrosa misión contra el mago más fuerte de todos Zeref, ella iba a entregar permanentemente todo de ella, los magos estaban acabados apenas podían mantenerse en pie frente al enemigo, estaban gravemente heridos y el enemigo no tenía ningún rasguño, ella sabía que era hora de hacerlo.
"Oh protección divina de aquellas estrellas que nos cuidan desde el inicio de la humanidad, como su diosa les ordenó seguir mis deseos, entregar la vida eterna a compañeros presentes y a sus frutos, destrozar el mal que se ha formado y hacer que la luz brille, en nombre de las tres diosas de la luz y las estrellas... Mavis, Layla y Polyusca, me entrego a ustedes."
Todos miraron impresionados como aquella delicada chica era rodeada por un cristal, nadie podía moverse pero cierto pelirosa se acercó a tomar su mano con ojos llorosos...
"Sigan su aventura eterna hasta que mi oración terminé, rodeenlos de felicidad y victoria, nunca les faltará nada ya que son mi familia, a cambio les doy mi vida ¡FAIRY TAIL!"
Y desde entonces han pasado cuatro largos años, la victoria contra aquel mago se festejó en todo el mundo, pero se lamentó la pérdida de aquella maga de espíritus celestiales, ella ya no estaba más, seguía encerrada en esa enorme esfera de cristal donde sus ropas eran de largas telas rodeando su figura y ondeando dentro, su largo cabello extendido y ambas manos unidas cerca de sus labios que formaban una sonrisa y una mirada cariñosa, ella dio su vida por la familia.
