Los sacrificios humanos de Alicia [LH]

Las cuatro Alicias

"La primera alicia estaba llena de valor
Con espada en mano se adentro en aquel país
Incontables fueron las perdidas que causo
Dejando detrás solo un sendero carmesí
Esa alicia en el bosque se quedó y en castigo a sus pecados encerrada se quedó
Arboles cubrieron toda forma de escapar
Nadie sabe si vivio, murio o donde estará"

-¿Donde estoy? ¿Qué es este lugar?

Manuel despertaba en una banca mientras miraba a su alrededor para identificar dónde estaba, no conocía nada ni a nadie. ¿Lo habían secuestrado? No, de ser así no lo dejarían en medio de una plaza lleno de gente que podrían alertarse ante el mínimo movimiento sospechoso por lo que invadido por la duda se acercó a la primer mujer que vio

-Disculpe, ¿Qué es este lugar?

-Este lugar es el país de las maravillas, Alicia, ¿Acaso te has golpeado tu linda cabecita?

-Yo no me llamo Alicia, me llamo Manuel

Irritado se alejó de esa mujer, ¿Por qué le hablaba con tanta familiaridad? El era un hombre además el país de las maravillas no existía porque era parte de un libro, creía que la mujer estaba loca así que se fue a tratar con dos guardias que parecían estar haciendo su ronda, tomó aire para tratar de no sacarse de quicio a la primera

-Eh...¿Alguno de los dos puede decirme donde estoy?

-Alicia, ¿Cómo no recuerdas donde vives?

-¿Quieres que llamemos al conejo para que vea como estas?

-¡Que yo no soy Alicia! ¡Soy un maldito hombre y mi nombre es Manuel!

Salió corriendo de allí, se estaba desesperando pero no se rendiría. El no era Alicia. Esto no era el país de las maravillas. Solamente todos estaban locos o eso quería creer pero cada vez que hablaba con alguien su cordura parecía abandonarlo mas y mas, quería irse a su casa para no volver a escuchar el nombre Alicia en toda su maldita vida

-Yo no soy Alicia

No sabe en qué momento, no sabe cuándo ni cómo pero asaltó a uno de los guardias tomando su espada y comenzó a atacar a todo el que se acercara mientras que lo único que escuchaba además de los gritos aterrorizados de la gente era lo que él mismo se murmuraba: "Yo no soy Alicia".
Al ver que venía un grupo de guardias armados para derrotarlo simplemente corrio, corrio sin rumbo fijo mientras jalaba sus cabellos en un ataque de histeria mientras que sus murmullos se volvieron gritos para convencerse más

-¡Yo no soy Alicia!

De un momento a otro, una jaula cayó sobre él y desesperado tomó los barrotes sacudiendolos mientras gritaba para que lo liberaran pero nadie acudió a su ayuda.
Nadie supo nada más sobre aquella Alicia luego de eso, se dice que aún sigue cautivo como castigo eterno, otros dicen que murió por hambre y deshidratación, otros que murió de locura al ver el camino carmín que dejó con su espada y zapatos de aquel genocidio aunque la verdad es que nadie sabe que paso

"La segunda alicia tenía una hermosa voz
Lleno con su dulce canto el extraño país
El bello sonido a aquella alicia enloqueció, tanta música arruinó a la pobre infeliz
Combinando unos altos y bajos
Consiguió crear un demente país
Y murió por el disparo de un hombre loco
Florecieron en su pecho rosas carmesí
Que tragedia ser amado y estar destinado a morir"

Martin abrazaba su guitarra perdido en sus pensamientos, su vista miraba un punto fijo en el piso pero no pensaba en nada como si estuviera en trance y hasta es posible que no sepa que este haciendo ahí pero con el pasar de los minutos poco a poco fue recuperando la conciencia al punto que asustado comenzó a mirar todo a su alrededor para comprender que pasaba