Uno de los grandes problemas a la hora de escribir es no saber por dónde empezar. A lo mejor tenemos muchas ideas en nuestra cabeza, pero a la hora de trasladarlo al papel -o a la computadora- simplemente no sabemos cómo iniciar.
Todo acto de escritura requiere un trabajo previo, en este caso definir la historia y sus elementos. De entrada ¿Cuáles son las partes de una narración?
✐Narrador - ¿Quién cuenta la historia?
✐Personajes - ¿Quiénes desarrollan las acciones?
✐Espacio - ¿En que lugar se desarrolla la historia?
✐Tiempo - ¿En qué momento ocurre la historia? ¿Es en pasado? ¿En presente?
✐Ambiente - ¿En que año y dónde ocurre la historia?
✐Argumento - ¿De qué trata la historia?
Más adelante trataré cada uno de manera independiente. Pero de entrada, cuando creamos una historia es importante tener más o menos en claro esos puntos. Cómo estamos hablando apenas del proceso de construcción de la historia, esto puede modificarse, sin embargo, mientras más establecido tengamos qué compone nuestra historia, será mucho más fácil escribir y a la larga no cometer errores.
En esencia, una narración se compone de
Inicio: La introducción de nuestra historia, donde presentamos a nuestros personajes y la situación y panorama general.
Problema: La situación problemática o punto a resolver por los protagonistas.
Clímax: Donde se desencadenan las consecuencias de las situación problemática.
Final: Donde se establece si se solucionó o no el problema.
Esa es la base de una narración. Del problema al clímax es lo que conocemos como: DESARROLLO. Que es la parte más grande de cualquier narración.
Cuando nosotros estamos construyendo una historia, es preferible tener claro cuál es el problema al que se enfrentan nuestros protagonistas y cómo va a terminar. Hacerlo así garantiza que no haya incongruencias en nuestro texto, que todo esté planeado hace una historia más sólida, improvisar puede funcionar en ocasiones, pero muchas veces eso puede romper con el esquema de historia que ya tenemos, a lo mejor porque no coincide con lo que ya hemos establecido en el inicio o porque va en contra de los personajes.
Por lo tanto si vas a hacer un giro inesperado al final, tenerlo claro desde el principio te ayudará a que se sienta orgánico y no forzado.
Otra cosa importante es saber que una vez que los personajes han resuelto el problema central de la historia, es poco recomendable alargarla, a menos de que tengan que enfrentarse a una nueva situación problemática -y repetir el esquema- escribir por escribir puede terminar en resultados poco sólidos.
Una vez que sabes cuáles son las partes de tu historia y sus elementos, entonces puedes empezar a desarrollar las ideas secundarias, es decir, cosas que complementan el panorama general. (Historias secundarias, algún tema o escena que quieras narrar, etc.)
Espero esto les haya ayudado :D
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Consejos y tips para escribir.
Non-FictionUna serie de reflexiones y consejos sobre la escritura y todo lo que tiene que ver en el proceso. No hay un orden particular, simplemente desarrollo ciertos temas conforme se me van ocurriendo.