"DEBI SER MAS ATREVIDO".

No hui, solo me encontre...

No lograba sacar de mi cabeza, dar una escapada de la realidad que me sofocaba desde que iniciaba el día, o hacerme el fuerte y negarme rotundamente a liberar lo que me ataba.
Eran las 5:01 el momento en el cual revise mi teléfono al despertar, al parecer a mi familia le encanta madrugar.
Tenia la batalla épica entre ducharme a tan tempranas horas del día o salir entre despierto, pero sin ánimos logre arreglarme.

Mi cabeza no se llenaba de expectativas, sino de pensamientos que agobian la existencia.
No dejaba pasar el tiempo, soy una persona jodidamente inestable, podría estar feliz en horas de la mañana y al final del día sentirme lo persona mas detestable del mundo...

Anhelaba llegar al lugar donde había recorrido la mitad de mi vida, y ahí con seguridad lograba encontrar un segundo hogar; sin embargo, mis inseguridades llenaban mi cabeza con absurdos complejos...
Terminaba mis noches sonando una playlist que podía hacer llorar a cualquiera.
Un mensaje me mantenía fuerte, insistiendo que solo era pasajero.

Los días parecían ser una rutina, siendo los días un pocos detestables, aunque cada que pasaban lograba entrar en completa paz,
Tocan a mi puerta, acompañado de un "Levantate, vamos a salir"...
Camino a nuestro destino, sonaban reclamos, enojos, peleas que no ayudaban a tratar de ser un buen día, en teoría.
Bajo del auto, y realmente no pude creer como la perfección podía caminar ¿Quién no se enamora a primera vista?
Trate de ignorar la belleza, y centrarme en que solo era un alegrón de ojos como de esos que ocurren en el autobús; pero el destino la ubico algunas mesas cerca de mi...
No sabia donde ver, debía elegir entre perderme en su mirada seductora o la sucia playa, no podía luchar contra una mirada tan penetrante; no descifraba sus intenciones, podía observar su miedo al chocar contras mis ojos negros que no expresan nada, por el temor de ser tan atrevido, bastaron unas horas para contemplar lo bello que puede llegar a ser el destino.
Mi mente gritaba:
-¡Eres un tonto!

De nuevo estaba en casa, terminando el día sonando una canción para tratar de descansar; Más no sabia que la situación pasada volvería a repetirse...

¡MIERDA!