15 Mentiras sobre Shin Hoseok ; hyungwonho

4. Él se ha ganado esta reputación.

Suspiré y me recosté en el banco, girando mi cabeza en dirección a Hoseok que mantenía su mirada fija en mi. Sonrió e hice lo mismo, para después volver a prestar atención en lo que Minhyuk y Jooheon decían.

—Entonces HyunWoo me invitó a salir después del festival del jueves, no sé si aceptar...—el mayor dijo mientras miraba con falso interés sus apuntes de la materia anterior.— No puedo negar que es guapo, pero no me convence por completo, le diré que no—Jooheon y yo asentimos sin decir nada, ambos teníamos suficiente con la “vida amorosa” del pelirrojo.

—Mejor deberías terminar el proyecto de Anatomía... Esa maqueta no se hará sola, HyungWon y yo hicimos toda la investigación, la entrevista y el ensayo—el menor habló tranquilo recostado en su lugar y con un puchero adornando su rostro. Asentí.

—Ya, ya, está bien, dejen de presionarme, lo haré pero con calma—se quejó un poco y después se levantó.— Iré por una botella de agua, el profesor parece no querer venir, estaré en la azotea durmiendo—enseñó las llaves de aquel lugar mientras caminaba hacia la puerta.

Ninguno hizo ademán de seguirlo, JooHeon parecía tener mucho sueño y yo sinceramente no gustaba de pasar tiempo a solas con MinHyuk. Recibí un mensaje de MyungSoo que tampoco tenía clase y decidí salir para dar una vuelta por el edificio, ya me había resignado a que el profesor no llegaría.

Fuimos por algo para comer a la cafetería y después al patio trasero del instituto aprovechando que se encontraba vacío.

—¿Aún sigues hablando con Hoseok?—preguntó mi amigo una vez estuvimos sentados bajo uno de los grandes árboles.

—Sí, te había dicho que no dejaría de hacerlo. Él... Me agrada, bastante si te soy sincero, creo que nos llevamos muy bien—desvié la mirada, dando un trago al bote de jugo.— Seguido voy a su casa o él va a la mía, pero casi no hablamos aquí, no quiere hacerlo por miedo a que digan algo de mi... ¿Es un tonto, cierto?—solté una ligera risa y MyungSoo hizo lo mismo mientras me miraba.

—Es gracioso porque aún así la gente habla, todos son tan pesados, no le encuentro sentido a estar hablando de otros, su vida debe ser tan aburrida. ¿Por qué no ignorarlo y ya?—dijo serio, como si estuviera enojado.— ¿Qué tiene de divertido crear rumores porque sí? Incluso de ti...—me sorprendí por aquello pero preferí no indagar más en el tema, mientras no llegaran a mi, no había problema.

De un momento a otro me encontraba recostado en las piernas del mayor mientras éste jugaba con mi cabello, estaba a punto de caer dormido.

—Myung...—sólo recibí un “mh” por parte del contrario.— ¿Qué hizo Hoseok?—pregunté de forma tranquila, mirándolo fijamente.

—Llevas tiempo así, bastante intrigado y curioso sobre el tema—cuestionó sin cambiar su expresión y manteniendo las caricias.

—Es mi amigo, hyung, pero es muy reservado en eso y no se abre tanto a mi, quisiera que las cosas fueran diferentes o haberlo conocido bajo otras circunstancias porque no le veo sentido a ocultar nuestra amistad—dije preocupado.— Pregunto a cualquiera y no me dan una respuesta, sólo dicen cosas como “él se lo ha ganado”.

—Su único error fue haberse relacionado con las personas menos indicadas, aún así todo es bastante exagerado.

No supe qué responder y MyungSoo tampoco parecía tener intención de decir algo más, pues me apartó un poco para poder levantarse y sacudir su ropa. Después el timbre anunció el final de la hora, por lo que nos despedimos y cada quien fue hasta su respectiva aula.

Las siguientes clases fueron una completa tortura, a quien se le haya ocurrido poner dos horas de matemáticas y dos horas de historia seguidas definitivamente estaba loco. Por suerte la última clase terminó y finalmente era libre de todo el estrés que los profesores me causaban.

Mis amigos me dejaron solo como de costumbre pues debían ir a su entrenamiento de fútbol, así que sólo quedaba esperar a que Hoseok terminara de arreglar sus libros para poder irme.

—Siempre tardas tanto y yo que muero de ganas por salir de aquí—solté en forma de queja y el contrario sonrió, murmurando un “lo siento”.— Por cierto, debemos apurarnos en llegar a casa, mi madre prometió que cocinaría un ramen especial para ti.

Los ojos de Hoseok parecían brillar.

—¿En serio? Eso es demasiado lindo de su parte—puso una mano sobre su pecho, sonriendo ampliamente.

—Por alguna razón vio que el nombre de tu contacto es “Chico Ramen”, me preguntó el por qué y como te quiere más que a mi, decidió prepararte algo—reí al recordar la situación.

—Eh~ te había dicho que quitaras ese apodo—dijo con una expresión bastante tierna, formando un casi puchero.

—Nunca, siempre serás el “Chico Ramen” para mi.

Ambos salimos del edificio rumbo a la parada de autobuses y en menos de 30 minutos ya estábamos frente a mi casa. Entramos y mi madre de inmediato salió de la cocina, sonriendo al ver a Hoseok a un lado mío. Vaya que le agradaba.

—Oh, llegaron antes de lo que esperaba—se acercó y acarició el cabello de Hoseok que sólo atinaba a sonreír. Puse los ojos en blanco, algo celoso.

—Ya, suficiente, mamá, estaremos en mi habitación, llámanos cuando esté listo—tomé la mano de mi amigo y lo arrastré por las escaleras.

Ambos nos tiramos en la cama mientras esperábamos, hablando de tonterías o de cualquier cosa que pasara por nuestra mente. A los pocos minutos estábamos nuevamente en el primer piso, Hoseok ayudando a mi madre a acomodar todo en la mesa.

—Ah, HyungWon, deberías aprender de él, hoy ha hecho más de lo que tú haces en una semana—se quejó.— No das el ejemplo.

Mi amigo sólo reía burlón ante los comentarios de ella.

—Ya, entiendo que lo quieras más, pero tristemente yo soy tu hijo y él no, entonces debes conformarte con lo que hay~—sonreí, acercándome al plato de ramen que tenía frente a mi.

El mayor finalmente se sentó junto a mi y empezó a degustar la comida, haciendo varios sonidos de satisfacción.

—Oh, ¡es tan delicioso!—comentó sorprendido.— Es genial, señora Chae, en serio es de lo mejor.

—Me alegra que te guste, puedo preparar más cuando quieras.

Hoseok agradeció y prometió venir más seguido a casa (cosa que puso bastante feliz a mi mamá), siguió comiendo lo que había preparado e incluso pidió un poco más. En ese tiempo pude ver que el simple hecho de que alguien le preparara su comida favorita le hacía tan feliz y él se mostraba tan agradecido ante eso.

Definitivamente, no eres como ellos dicen, Shin Hoseok.

🎀

AMIXEEEEEEEEEEEES, I'M BACK!!!!

REVIVÍ, RESUCITÉ COMO JESUCRISTO Y TRAJE ACTUALIZACIÓN. ; - ;)/

Neta no sé cómo salió ésto, pero no me queda nada de imaginación, estoy seca, no puedo pensar nada más, incluso tardé 3 días en ésto. Estoy lista para desaparecer otros 6 meses :u (bromi)

Como sea, gracias a las nuevas personas que llegaban a leer esta historia, votaban, comentaban en cada capítulo y luego se encontraban con que no había actualizado hace 10 siglos 😭 me recordaban con cada notificación que soy un asco de escritora, pero por eso mismo volví.

La buena noticia es que creo que actualizaré más seguido (si es que mi rutina me lo permite juejue), nuevamente tengo más claro lo que quiero escribir y eso.

Again, gracias por esperar, votar y dejar comentarios maldiciendome por no actualizar, los amo a todos, valen mil y lo aprecio. 🌝❤️

Ya, bai.