Secret Love | Yoonmin | Mpreg

Especial Random

Sintió suaves movimientos sobre su pecho, incluso presión en ciertas zonas. Abrió los ojos con pesadez observando el reloj, era muy temprano al menos para él y sobre todo en sábado.

Gargajeos suaves llamaron la atención de sus sentidos y volteó de inmediato abajo. Encontrando a Junye encima de su pecho recién levantado, al parecer acaba de despertar y al notar la atención puesta en él no fue necesario iniciar con un llanto para despertar a su padre.

--Hey... buenos días pecesito.-- aún no entendía como es que Junye había dormido toda la noche sobre su pecho y él o Jimin no lo habían aplastado.

Giró la cabeza para mirar a Jimin dormido profundamente. Estiró su cuello lo más que pudo y dio un beso en su frente para después sujetar a su hijo y levantarse de la cama. Era obvio que su pecesito tenía hambre, si no probablemente seguirían acompañando a Jimin en su reparador sueño.

Cerró la puerta con cuidado y fue directo a la habitación de Junye. Al parecer su hijo aún tenía pereza, ya que estaba demasiado dócil y tranquilo. Lo colocó en el suave mueble, cambiando su pañal y mameluco, esa mañana no era calurosa pero tampoco era un clima agradable.

--Más tarde tomaras un baño y ni el mayor llanto podrá salvarte de eso.-- le tendió su dedo y Junye de inmediato se aferro a este con ambas manitas. Yoongi sonrió al ver jugaba con sus dedos, su hijo era adorable, sus enormes mofletes que le hacían parecer un pez. Era obvio que fueron heredados por Jimin. Aún no comprendía como un ser tan pequeñito se había adueñado de su corazón e incluso su propio bienestar.  Pues a Yoongi le importaba poco saltarse comidas, ducharse, dormir lo suficiente y atrasar su trabajo solo por atenderlo a él y a Jimin.

--Espero que después del desayuno vuelvas a dormir cacheton...-- una de las locas y exageradas ideas de Jimin fue poner un vaporizador y un calentador portatil en el cuarto del bebé para preparar biberones y no fue tan mala idea.

Dejó a Junye en la cuna y este de inmediato comenzó a quejarse.

--Ya... necesito preparar tu leche.-- bufo Yoongi y simplemente creyó que ignorarlo sería lo mejor, pero lo descarto al reconocer el famoso sonido de fuertes pujidos. Pues se aproximaba un incontrolable llanto.

Dejo todo botado en la mesita y caminó a paso veloz a la cuna. Lo que menos quería era despertar a Jimin.

Sujeto entre sus brazos y pecho el pequeño cuerpo y lo miró con los ojos entrecerrados y el ceño fruncido.

--Manipulador y mimado.-- bufo sin creérselo, accedió a un bebé de 4 meses. Lo sujeto en un brazo y con dificultad preparó el biberón, comprobó la temperatura para después batirlo y colocarlo en la pequeña boquita de su hijo.

--Te voy a cobrar todo esto cuando éste viejo.-- dijo meciendolo suavemente. Vio el sillón dónde las primeras semanas Jimin se la pasaba todo el día ahí y no lo culpaba. Ese sillón reclinable era muy cómodo.

Se sentó con Junye en brazos y éste mamaba el chuponsillo del biberón, Yoongi notó que estaba bebiendo demasiado rápido por lo que tuvo que reclinarlo un poco, no quería que su hijo estuviera sufriendo después por los terribles cólicos que más de una vez le habían dado a su cuidado. Pero no era su culpa, el manual para ser un padre perfecto no decía eso y mucho menos se lo explicó Jimin ya que "era demasiado obvio".

Junye comenzaba a cerrar los ojos y a chupar por inercia, Yoongi besó su cabecita y rozo su nariz con los delgados y suaves cabellos disfrutando el olor a "bebé" era tan suave pero a la vez tan penetrante a talco sutil y leche materna.

--Siempre cuidaré de ti, angelito...--