Ya son las 6:30 de la mañana, y yo aún aquí en mi cama mirando la ventana, un hermoso amanecer.
Los rayos de sol nublan mi vista, por lo cual salgo de mi cama con una pesades única, salí de mi habitación con dirección al tocador.
-¡Alejate!- le digo a mi hermana, quien no es la persona mas respetuosa del mundo.
-¿Y que harás? ¿Llamar a mamá?- dijó sarcasticamente.
-¡Sí!- Esta estupida no arruinará mi hermosa mañana.
Sólo sentí como su presencia se alejaba, así que me dispuse a bañarme. Mi hermana es muy buena persona pero hay veces en las que me saca de mis casillas, es peor que la novia de Chucky cuando se lo propone; su nombre de Natalie.
Se me hizo un poco tarde para llegar a mi centro de estudios, así que tube que tomar un taxi para llegar temprano, pero valía la pena; pero ahí estaba el chico mas lindo de todos y por suerte era mi enamorado.
-Hey Kian- Ví como su escultural cuerpo se volteaba a verme y con eso sus hermosos ojos color agua, a veces me preguntaba por que estaba conmigo y no con una chica salida de revista, pero cada vez que se lo preguntaba el fruncía el ceño y no decia nada... obviamente se enojaba y lo único que me decia para responder a mi comentario era "Tú" y hacia un corazon con sus manos al frente de su corazón.
-Debb, Hola cariño- Recibí un cálido beso por parte suya, claro siempre vigilando que ningun catedratico o asesor estuviese por allí.
Así fuese la universidad, teniamos prohibido tener enamorado o estar haciendo cosas indecentes en frente de personas de la universidad o fuera de ella, ya que supuestamente era una mala imagen a la universidad, y ¿Porqué no lo haciamos y desobedeciamos las reglas?, simple tres llamadas de atención y te retirabas de la universidad sin poder quejarte, ademas como era universidad pagante y parroquial habia eso de "Clase social" y si hacias algo malo al que miraban eran a tus papás así que eso no me gustaba: siempre fuí una chica tranquila, aunque las mas tranquilas siempre son las peores, bueno es lo que dicen.
Así paso toda la mañana, con puros estudios pero orgullosa de mi carrera profesional ya que recibí el apoyo de mis padres para poder escogerla, mi mamá es grandiosa.
Al llegar casa me encontre con mi mamá y con un señor al cual no conocia, se me hizo muy raro ya que hicieron un gran almuerzo, como hecho de chefs profesionales.
Nos sentamos alrededor de la mesa el señor el cual se llamaba Patrick, mi hermana, mi mamá y yo.
-Bueno desde hace mucho tiempo queria presentarles a Patrick, es mi pareja- Dijó mamá. Mis ojos se abrieron como si estuviese recibiendo un castigo, que rayos le pasaba a mi mamá.
-Bueno es un gusto- Dijo Natalie, cada vez que ella queria podia ser la niña mas adorable del mundo y en este caso le convenia.
-Para mi no tanto- Salí corriendo del comedor con dirección al único lugar donde me sentía segura, habia mas arriba de mi casa un parque en el que habia una cascada y detrás de ella habian unas escaleras, subiendo eso estaba un escondite con una mirada espectacular; solo sentí como mis lagrimas recorrian mis mejillas.
A mi se me hacia dificil esta noticia ya que toda mi vida nunca viví con un hombre, mi papá siempre estuvo ausente, claro venia a visitarme a darme mis regalos "Como si eso recompensará el amor de un padre" pero nunca lo tuve ahi para mi y eso me dolía y para que alguien desconocido venga y ocupe su lugar, no gracias.
Llegué a casa después de 3 horas, todos estaban en la sala excepto mi hermana; como era de costumbre estaba segura que recibiria ese sermon que duraria años pero por suerte estaba Patrick ahí y por primera vez en mi vida mamá solo me habló y no hubo gritos.
Entre a mi cuarto, tiré mi ropa sobre la cama ya que no era la chica mas ordenada del mundo, en fín me puse a mirar peliculas de comedia para que siquiera me alegrara un poco el día.
Termine quedandome dormida, no pude controlar mis sueños, solo sentí como alguien tocaba la puerta diciendo:
-Debb apaga la Tv.
-Esta bien
En estas ocaciones es cuando preferia irme con mi papá a su casa, claro nunca habia vivido con él o si lo habia hecho no me acordaba, tenia la necesidad de estar con él para que me aconsejará, por su parte no estaba buscando pareja solo decia que mi hermana y yo eramos el motivo de su vida, que nosotras dabamos sentido a su vida; mis pensamientos se fulminaron cuando me dí cuenta de mi realidad.
A veces me refugiaba en mis amigos, me aconsejaban de buena manera, trataban de ayudarme en especial Lucia, no eramos tan distintas tal vez por eso nos entendiamos muy bien, es como si o estuviese pensando en algo y ella ya lo supiese; cuando eramos mas pequeñas yo era una niña muy solitaria con miedo a socializar debido al divorcio de mis padres, nose, era esa sensación de sentirme diferente a los demas; pero vino ella y me dió esa seguridad que necesitaba, desde entonces somos inseparables.
"¡Diosito, ayudame!", lose ya estoy grandesita para eso, pero es lo único que se me vino a la mente, ya que no sabia como debia reaccionar ante la desición de mi mamá, me sentia tan insegura de decir si bien Patrick es un gusto que formes parte de mi familia o solo ignorar el asunto pero ¿Cómo ignorarlo? Estaba tan confundida tenía tantas ideas en la cabeza, queria hablar con alguien pero para mi mala suerte Lucia llevaba el celular apagado, de seguro estaba con su enamorado llamado Matias, el la verdad no me caía muy bien ya que simpre pensé que le era infiel a mi gran amiga; ya que Lucia no contestaba el celular lo único que pude hacer es entrar a conversar un rato por las redes sociales.
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Hola, soy nueva en esto quisiera tener mucho su apoyo.
Espero que les aiga gustado por que aun hay mucho por disfrutar, esto es solo el comienzo
Gracias.
