𝐭𝐡𝐞 𝐧𝐞𝐰 𝐰𝐨𝐫𝐥𝐝 ⧼ taehyung

Capítulo 20

Aquel incómodo silencio tenía nombre; Lee Chunghee.

Mamá, Taehyung y yo nos agrupamos en el centro de la sala de estar, estábamos esperando el momento en que él se hiciera presente. Los segundos pasaban y pasaban, cada vez se sentía más tenso el lugar, pero aún así estaba como si nada.

Mi madre se separo de nosotros, observó por la ventana desde una distancia prudente y habló.

— Tal vez solo fue un mal entendido —volteó a vernos y giró su vista nuevamente a la ventana.

— En primer lugar ¿por qué pensaron que él estaba aquí? —Taehyung volteó a vernos, su mirada era fácil de leer: miedo y confusión.

— Eres un Kim, Taehyung ¿cómo es que no lo sientes? —pregunté confundida.

— Es mitad lobo, Karly. Taehyung no tiene todos los poderes provenientes de nuestra familia, aunque sea un Kim, al convertirse en un híbrido perdió la mitad de nuestros poderes y con ello los más importantes como sentir la presencia de un Lee —explicó mi madre. Taehyung asintió. Espera... Taehyung había preguntado por ello, por qué asintió ¿No qué no lo sabía?

Oh por Dios.

— ¡MAMÁ!

N A R R A
T A E H Y U N G

Me encontraba en mi habitación, acomodando las últimas cosas en las cajas de mudanza. Esa sería la última noche que estaríamos ahí, desde el siguiente día viviríamos en la casa de Yujin, en el bosque, el lugar estaba completamente alejado de la ciudad, es un lugar remoto, nadie conoce ahí, nadie ha podido llegar hasta ahí. ¿Por qué? Como lo dije antes, el lugar está totalmente perdido en el bosque y si un humano trata de entrar, lo más probable es que se pierda y ahí es donde viene la segunda razón; lobos, que esa persona sea asesinada o devorada por lobos.

Escuché un ruido cerca de mi ventana y me percaté de que está estaba abierta, cosa totalmente inexplicable, porque podía jurar que todas las ventanas de mi habitación estaban cerradas. Caminé hasta ella, miré hacía afuera y me di cuenta de que todo estaba tranquilo. Cerré la ventana y caminé hasta la salida de la habitación, pero la puerta se cerró de golpe, creando un estruendoso ruido, me detuve de golpe y giré mientras observaba el lugar.

Oh por Dios, lo que me temía...

— ¿Qué haces aquí? —pregunté caminando hacía él.

— Oh, raro y peludo Taehyung... pensaste que los dejaría en paz. Mi padre fue un cobarde y un débil de primera, pero gracias a Dios yo no soy igual a él —sonrío y miro hacía mi.

— ¿Qué ganas con hacerles daño?

— Eres demasiado lento, Kim —rió y se levantó del sillón que estaba cerca de mi cama, acercándose a mi— sabes que esa niña es más fuerte y poderosa que yo y lo que queda de mi familia. Podría destruirnos en un segundo, si así lo quisiera.

— ¿Y entonces por qué estás aquí? —pregunté incrédulo.

— Porque necesito tu ayuda —su tono de voz había cambiado dramáticamente, parecía que estuviera rogándome.

— ¿Mi ayuda? ¿En qué podría ayudarte yo a ti? —Kang Bin pidiéndome ayuda, eso no se ve todos los días.

— Para matar a Karly.