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Esos momento en los que jugábamos en el parque cerca de mi casa, en Corea, e incluso nos escapamos en ciertas ocasiones sólo para ver el lago que se encontraba camino a nuestra cafetería favorita.

¿Lo recuerdas? Tan felices en esos momentos y tan difíciles de olvidar. O cuando querías ser un gran mago y tu madre te regalaba juguetes para que practicaras pero lo dejaste cuando en la escuela algunos se burlaban de tus intentos, aunque siempre nos causó gracia.

Tus tiernos pucheros cada vez que no podías conseguir algo, tus pequeñas sonrisas que sólo pocos lograban ver, tus frases sarcásticas cada vez que conocias a alguien, tu mal humor cuando despertabas temprano para ir al colegio.

Todo en ti fue tan maravilloso, es como si no tuvieras un solo defecto, o tal vez yo fui el que no quería aceptar cierta característica tuya, pero dime ¿qué puedo hacer ya? La respuesta es fácil ¿no es así? Pero olvidemos esto por un momento, por favor...

Un hermoso atardecer, teñido de naranja casi rojo a causa de los últimos rayos del sol, cuando entraste a mi cuarto y lloraste, como nunca antes te había visto hacerlo. Me contaste tus razones por las cuál lo hiciste, pero lo curioso fue que en tu mirada logré leer: "Por favor quedate conmigo, no importa el tiempo que dure, hazlo por mi, por nosotros".

Nuestro primer día en preparatoria fue un tanto gracioso, cuando un pequeño grupo de chicas se acercaron a coquetear contigo y tú, en cuanto me viste, te acercaste y me tomaste de la cintura y besaste mi mejilla, mientras reias por las reacciones de las chicas.

Desde ese día tu trato cambio conmigo, eras más atento y eso me ponía nervioso, lo que provocó que me sonrojara frecuentemente. Sin darnos cuenta nos fuimos acercando cada vez más y nuestro lazo de amistad se hizo más fuerte hasta convertirse en algo importante, que no podríamos ignorar.

Cuando me invitaste a salir comúnmente salía algo mal por lo que siempre, o al menos cada vez que podía, los mencionaba mientras reíamos. Dime, ¿cómo puedo olvidar recuerdos tan importantes de mi vida? "Ojalá si..." "Si tan sólo..." "Si hubiera..." son simples frases vacías que evito a toda costa pensar, sin embargo mi mente logra traicionarme.

"Azul, era el cielo
azul, era el mar,
en mi mano con un pañuelo
intentando mis lágrimas frenar...

─ Su pulso está disminuyendo...

─ Llamen al doctor, ¡rápido!...

─ No cierres los ojos... eso es, estarás bien, sigue...

─ ¡Lo estamos perdiendo! Por favor...

Una promesa hicimos
donde juramos amor eterno
y enfrentar al mundo quisimos
con un lazo materno...

─ ¡Espera! Estás equivocado en...

─ Mira, el pincel se usa así...

─ Vamos, tu puedes, lo logra...

─ ¡Es perfecto! No había pensado en...

─ Eres hermoso, ¿lo sabías?...

Un simple recuerdo
junto a una linda sonrisa,
mi vida poco a poco pierdo
mientras hay una pequeña brisa...

─ Bienvenido pequeño, ¿cómo...

─ Eres gracioso, a partir...

─ ¡Oh, lo siento mucho! No sabía...

─ Dilo y te dejaré libre...

Un pequeño rayo se asomó
una sombra tomó forma,
una sonrisa se formó
junto a mi voz se conforma.

Pero eso no es lo importante
pues es mi amor, mi alma,
y es mucho más brillante
que el azul que transmite calma."

Y azul era el hermoso color de tus ojos, Jimin...

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Para los que quieran (o no, pero les interesa) habrá un capítulo, aunque probablemente lo publique mañana o el día siguiente.

Antes de que se me olvide, esta parte es narrada por Yoongi

Sam.

Azul ⋄ YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora