Hola k ase, soy Carlitox ( En verdad soy Joan, pero me cambio el nombre porque ahora todos nos lo cambiamos, Laura en su historia se hace llamar Tin, Sofía en la suya cambia todos los nombres y Fernando me llamó Juan y a Jorge, George ) y soy el protagonista de esta mierda de historia.Todo empezó hace mucho tiempo, allá por el 2016.
Bajábamos mis compañeros : Juan José María Isidro (Juanjo) Octavia (Laura) Paca (Sofía) y María de las Flores 3ª (Mariola) al comedor. Octavia hablaba de algo sobre las gotas de agua y plástico y... bueno, que si el agua está contaminada, que si la evolución es una mentira, que si Matrix, que si pensaba escribir un libro en el que se llamaría Tin y se titularía "Gotas de Plástico", sus cosas en general.Estábamos comiendo tranquilamente cuando, de repente, el cielo que hasta entonces había estado completamente despejado se cubrió de grandes nubarrones oscuros. Comenzaron a sonar fuertes truenos y luminosos relámpagos.
-Ay va la mierda! - suspiré.
Entonces unos hombres vestidos completamente de negro y con pasamontañas entraron en el comedor, comenzó a sonar una alarma y todas las puertas se cerraron.
-¡Mierda, ya me han pillado!- Dijo Juan José María Isidro mientras de un salto se levantaba de la silla.
Su intento de gracia, fue acogido por un par de medias carcajadas forzadas y por la desaprobadora mirada de Octavia.
Ante la mirada de ésta, Juan José María Isidro miro al suelo, se disculpó y volvió a su asiento.
- Nadie saldrá de aquí hasta que yo lo diga- la voz de aquel hombre de negro con pasamontañas estaba enmascarada por un modulador de voz, de esos que usan algunos YouTubers para hacer sus vídeos.
Al oír estas palabras, Paca miro al suelo y susurro un "No polfavol".
-¿¡Qué mierdas te ocurre!?- pregunte con la sensibilidad que me caracteriza.
- Pasa, que... es muy posible que no volvamos a salir nunca, y... bueno, si morimos, he de decirte algo muy importante.
-¿Qué?- pregunte fingiendo que su respuesta me interesaba.
-Pues... C-MAMO !!.
Me quedé más blanco de lo normal, inmóvil en mi sitio.
-Enserio???- preguntó preocupado Juan José María Isidro.
-No, era una coña para ver vuestras caras de imbeciles al pensar que yo podía c-mamar a Carlitox.
Todos rieron menos yo, que aún estaba en estado de shock. En apenas unos minutos, me habían hecho rehén, una mujer me había c-mamado y esa misma mujer había dejado de c-mamarme, demasiado para mí body.
Debido a nuestras fuertes risas, causadas por la cruel broma de Paca, los hombres de negro se fijaron en nosotros.
- Esos de ahí servirán- dijo uno de ellos entre susurros.
El grupo de hombres se acercaron a nosotros dando grandes zancadas.
- Kaka- exclamó María de las Flores 3ª.
La agarraron del pelo y de un golpe la dejaron tiesa sobre su plato de deliciosas, suculentas y calentitas lentejas, nos agarraron a los demás y uno tras otro nos iban dejando inconscientes.
De pronto, todo se hizo negro y un profundo sueño me invadió, no tenía fuerzas para luchar, ni tampoco para huir, tan solo como para respirar y que el corazón, cada vez más lentamente bombeará sangre a cada parte de mi cuerpo, o no, todo es relativo.