Te abrazare, te diré siempre "Te amo". Te llamaré con un apodo, da igual si es "Princesa", "Enana", "Fea", "Mi niña", "Mi tonta", "Cielo"; lo importante es que sólo te lo diga a ti y a nadie más. No hace falta eso de "Buenos días, princesa", con un "Hey enana, ¿cómo has dormido" basta; hay veces que suele gustar más.
La sonrisa tonta cuando te miro, eso no puede faltar. Cuando vaya por delante, te cogeré por la cintura y te daré un beso cerca de la oreja. El "Buenas noches" es importante; tampoco se necesita un "Buenas noches, princesa", con un "Descansa y sueña conmigo, te amo, y necesito que lo sepas" basta, y mata demasiado.
Delante de mis amigos no te trataré diferente a como te trato a solas. Eso de darte mi abrigo también es un gran detalle. Besos tiernos con cariño, si puedo, cerca del cuello. Esos días cuando te pongas a llorar encima de la cama y crea que no puedo hacer nada, no escribiré un gran mensaje; ire a tu casa y hare esas tonterías que sólo yo hago; cuando te rias con lágrimas en los ojos, entonces, me habre enamorado un poco más... Susúrrare lo mucho que te envidian esas chicas que están detrás intentando joderte. Jugare con tigo cuantas veces pueda. Cuando te enojes, tratare de no enojarme, mejor te trataré con delicadeza y amor, y sobre todo, te comprendere.
Te haré reír, te hare feliz, te hare sentir que siempre puedes contar conmigo y estaré a tu lado para ti ya no es solo tu ahora somos dos saliendo adelante juntos.
Te amo.
