Siempre quieta, siempre sentada en su cama, parecería muerta sino parpadeara, si su pecho no se inflara y desinflara al ritmo de la respiración. Casi no habla, solo lo mínimo necesario, casi no bebe ni come hasta el punto que su piel, que se adhiere a sus huesos y es blanca como la cal, pareceria que no está.
Algunas personas dudan que se pueda trasladar, o por su aspecto físico, que dá la impresión de que si se para se va a romper, o porque piensan que está en algún tipo de trance, que su alma abandonó su cuerpo. Pensamientos de personas que no conocen, y que juzgan a todos por que son diferentes a ellos, pero lo único que se necesita es paciencia para poder comprender cuál es su historia...
Llovia a cántaros cuando la vi. Su pelo negro como la noche y sus ojos grandes la dotaban de una extraña belleza. Caminaba con pasos lentos y cortos, sin prisa, sin rumbo. De repente se sentó dándole la espalda a la casa y se quedó inmóvil mientras el agua le escurría por el pelo. Se puso a llorar, no, no estaba llorando, se estaba riendo. Me separé de la ventana abierta, de donde la había estado observando, y fui a abrir la puerta. Me acerqué a ella y le toqué el hombro, pero con un brusco movimiento del mismo rechazó mi mano. Dejó de reirse y al instante se paró y con paso seguro entró a la casa.
Algo le debería haber pasado para que se comportara se esta manera. No tenía familiares de eso estaba casi segura, porque sino la hubieran buscado, hubieran puesto carteles, la hubieran cuidado mejor, y si tenía, seguramente, no les importaba. Tal vez la abandonaron porque pensaban que estaba loca o quizás no la querían, pero no, tampoco parecería que hubiera huido, dado que no traía ningún bolso solo lo que llevaba puesto. Algo la había trastornado, pero no está loca, lo aseguro.
Compartimos cuarto ya que me da miedo que se quede sola y que cometa una locura, aunque tampoco hay otro. A veces le agarran ataques de depresión y rompe cosas, esa es la causa de que no haya nada de vidrio, de cerámica u objetos rompibles en mi casa. Otras veces sale de lo que se puede llamar "trance" y tiene etapas de lucidez, pero inmediatamente vuelve a ese estado vegetativo, de reposo. Parece que supiera dónde está, de como llegó,, pero hay días que es todo lo contrario. Este lugar la tranquiliza. El silencio del campo con sus débiles sonidos de pájaros es el lugar perfecto. Hay veces que su expresión cambia cuando mira el monte mucho tiempo, o cuendo alguien entra a la casa y tiene esa mirada de que está esperando a alguien y luego la decepción de que no era la persona que esperaba.
Después de entrar en mi casa la observé mientras miraba todo (el cuarto, la cocina, el baño) y luego, siempre callada, se sentó en la cama. Y así'permanece la mayoría del tiempo.
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Una historia mas
Mystery / Thrillernunca te has sentido solo? que las personas no son lo que dicen ser? que no puedes confiar en nadie? fui feliz hasta que deje de serlo...