Lucky Bullet (Kaisoo/Lemon)

Un futuro prometedor

Anteriormente

Observo con atención al profesor dar uno de sus últimos discursos dirigidos a la clase. La sala es amplia y de tonos claros, repleta de pupitres y con un par de pizarras tras el escritorio del educador. Aproximadamente unos noventa alumnos permanecen sentados, la mayoría atendiendo mientras que otros pocos se dedican a estar absortos, seguramente pensando en el próximo evento para los estudiantes de último año de carrera. Queda tan solo dos semanas para finalizar nuestra vida universitaria y nos deshicimos de los exámenes ayer mismo. Después de una ardua semana de estudio y pruebas escritas al fin podemos respirar y dormir en paz. Sinceramente, aún se me hace increíble que todo haya pasado tan rápido.

La carrera de economía y dirección de empresas puede parecer demasiado aburrida para algunos, pero a mí me ha resultado demasiado interesante. Atrayente en su cierta medida. Aunque el motivo puede ser el hecho de haberme criado en una familia de empresarios populares en Daegu en el sector económico. Uno de ellos mi padre, el magnate más conocido actualmente debido a su buen raciocinio y su destreza al elaborar estrategias comerciales. Soy el siguiente en la sucesión al puesto de director en su agencia y me he dedicado a prepararme durante estos cuatro años con bastante entrega y casi sin descanso. He conseguido una de las mejores calificaciones de mi promoción, logro que llena de orgullo tanto a mi familia como a mí. Una vez obtenga mi diploma después de la graduación tendré un puesto asegurado en la empresa familiar, como coordinador o sub-director. Tan solo será una situación temporal hasta que me toque asumir la máxima responsabilidad del trabajo. Es un buen oficio y bien pagado. Sinceramente estoy agradecido con la vida que me ha tocado vivir, ya sea en el sentido económico, como familiar o laboral.

Un pequeño ruido perturba mi atención. Frunzo levemente el ceño y miro por el rabillo del ojo a uno de mis amigos más cercanos. En ese momento lleva el cabello teñido de castaño claro, con algunos reflejos oro. Sus labios se ensanchan un poco al mostrar una sonrisa ladina. Jongdae se dedica a dirigirme sonidos para llamar mi atención. Ruedo los ojos disimuladamente.

-¿Qué pasa?-susurro con discreción. No quiero ser reprendido por no mantener silencio. Mi expediente tiene que ser pulcro.

-¿A qué estás ansioso por la fiesta de despedida?-murmura con una sonrisa más amplia en mi dirección.

Y ese es el evento, la adorada por muchos fiesta como despedida de la vida estudiantil. Es una tradición que los universitarios de último año no dejan pasar al graduarse. No voy a negar que me gusta salir de noche a discotecas para divertirme un rato, pero tampoco estoy tan ilusionado como otros. Los jóvenes se reúnen con sus grupos de amigos y acaban coincidiendo en el mismo local. Es conocido como la mejor discoteca de la ciudad, con bastante espacio como para estar cómodo aún habiendo muchísima gente. Buena música y un ambiente bastante excitante. Por no hablar de la buena reputación que tienen los DJ que se acercan por allí a trabajar.

Me encojo de hombros sin darle demasiada importancia. Considero que es pronto para emocionarme por ello. Escucho como deja escapar un chasquido de desilusión y me obligo a aguantar una pequeña risa que está comenzando a aparecer mientras revuelvo un poco mi cabello castaño oscuro. Conozco a ese chico desde la primera clase que compartimos hace cuatro años y puedo considerarlo uno de mis mejores amigos.

Poco después, el profesor termina de hablar y todo el mundo comienza a recoger sus útiles desesperados por conseguir ya la anhelada libertad. Ya es la finalización por hoy de las clases. Mientras guardo mis cosas en la mochila voy haciendo una lista mental de las tareas que tengo que hacer esa tarde, una de ellas acompañar a Dae a comprarse ropa para el gran acontecimiento. En resumen, recorrerme junto a ese zoquete todo el centro comercial soportando sus indecisiones. Si encuentro algo de mi agrado también aprovecharé. Completamente perdido en mis pensamientos, no soy consciente cuando alguien se acerca por mi espalda y cubre mis ojos hasta que todo se vuelve negro. Quedo estático intentando adivinar quién puede ser, aunque su perfume a lavanda no tarda en delatarla.

-Hyuna, ¿no te cansas de actuar como una niña pequeña?-bromeo mientras continuo recogiendo a ciegas. Ella no tarda en dejarme ver de nuevo haciendo un mohín.

-Eres un aburrido, Jong-refunfuña para después enseñarme su lengua todavía mostrando una actitud más infantil. Sé que en realidad ella es madura y responsable, pero ese toque aniñado le da un cierto encanto para socializar con los demás.

-Sabes que aún siendo aburrido me quieres- sigo la broma guiñándole un ojo para después levantarme del pupitre ya con la mochila bien colocada en mi espalda. Un leve sonrojo cruza sus mejillas, el cual decido ignorar- ¿Tú también estás eufórica por la fiesta como ese de ahí?-señalo con el pulgar a mi amigo que se ha quedado dormido sobre su mesa. Un no muy visible hilillo de saliva recorre su barbilla.

Ella ríe brevemente y queda por un segundo pensativa. Su cabello largo y pelirrojo recogido en dos trenzas cae por su espalda mientras sus ojos brillantes se fijan en mí. Un leve ronquido por parte de Jongdae llega a mis oídos. Yo me acomodo la mochila observando de reojo al chico. Queda dormido tan fácilmente durante el día por pasarse la noche jugando a videojuegos. Niego con la cabeza casi imperceptiblemente y vuelvo mi atención a la chica. No tarda en aclararse la garganta para comenzar a hablar.

-Bueno, no siempre uno puede celebrar su graduación universitaria-concluye tranquila para después darle un pequeño golpe en el brazo a nuestro amigo haciendo que se despierte de un bote asustado.

Sopeso sus palabras observando como este no tarda en reaccionar y recriminar a la joven que ríe satisfecha. Ambos comenzando a enzarzarse en una guerra verbal de reproches y burlas. Acabo cediendo y suspiro cansado mientras me apoyo medio sentado sobre un pupitre. Puede que esa fiesta sea el final de una etapa y el inicio de una nueva. Y más adelante comprobaré que no estoy nada equivocado.