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Mañana es viernes, se supone que debería estar alegre ya que llega el fin de semana.

Pero ahora mismo me encuentro en la miseria, una miseria creada exclusivamente por mi para mi, de la cual no sé salir y lo único que hace es undirme más.

No creo que tenga fuerzas para ir mañana a clase. A ver, nunca tengo ganas de ir y deseo quedarme en casa; pero ahora mismo siento incluso desesperación al pensar si quiera en ir a clase.

Solo quiero pasar los días enteros en la cama sin hacer nada. Durmiendo o, como máximo, escuchando música.

Y para colmo, últimamente estoy engordando muchísimo y no puedo parar de comer. Cuando trato de comer algo más ligero o que engorde menos, acabo comiendo mucho o mi padre me trae algo (ya sea chocolate, bollitos, palomitas...) y el siempre dice -Ay, es que me apetecía mucho- y a mi me da rabia porque yo como también y por lo tanto como mucho más.

Acabo de darme cuenta de que no releo lo que escribo, tampoco pienso en que voy a escribir ni como lo haré. Simplemente escribo lo que se me pasa por la cabeza; por lo tanto, pido disculpas por cualquier falta ortográfica o de coherencia en alguna oración o párrafo.

PesoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora