4 años desde aquel fatidico dia en el que la luz del amor de su vida se apagó para siempre.
El jovén enamorado aún hasta hoy se hechaba la culpa de la muerte de su amado, se decia a si mismo:
"si no hubiera ido ese dia al bosque, ahora estubieramos en casa viendo la tele mientras discutes conmigo sobre quien se habia terminado las gomitas y yo callaria tu boca con un beso y... te abrazaria fuerte para que nunca te fueras de mi lado.."
Desde aquel dia todos los dias han sido un martirio, aún recuerda la cara de la tia Cass cuando le contó lo que pasó, no lo podia creer, habia perdido a toda su familia, en ese momento habia quedado en shock, los amigos de Hiro, sobre todo Honey, estaban debastados, aún no olvidaba sus rostros, en especial aquellas amargas palabras de la joven morena sabelotodo: "Fue tu culpa! Si no fuera por tu irresponsabilidad Hiro aún estubiera vivo!"
Al escuchar esas palabras sintio el gran impulso de soltar un puñetazo hacia la cara de la joven ingeniera, pero por respeto a los presentes no lo hizo, más Adela, quien estaba al lado de Miguel tuvo el placer de contestar a tal comentario tan irrespetuoso:
-Aqui todos lamentamos el repentino
fallecimiento de Hiro, que poca madre que seas la unica que lo vea como una oportunidad de hacer sentir mal a la PAREJA de nuestro amigo. Si no vas a aportar consuelo alguno la puerta es muy grande y nadie te impide el paso.
Desde entonces, cada 2 de Noviembre Miguel hace un pequeño altar cerca del rio en el lugar donde falleció su amado. Fue una promesa para que así pudiera cruzar el puente de cempasúchil para poder reunirse aunque fuera una vez al año. Una cosa era segura, Hiro jamás seria olvidado.
Llevaba consigo su guitarra para cantarle a su amado, a el siempre le encantaba escuchar a Miguel tocar y cantar, le gustaba escuchar su musica para arrullarse en las noches y eso es lo que hacia Miguel aún despues de su muerte, el iba a cantarle para arrullarlo en su descanzo...
Recuerdame... hoy me tengo que ir mi amor... recuerdame... no llores por favor.
Te llevo en mi corazón y cerca me tendras... a solas yo te cantaré soñando en regresar...
Recuerdame... aun que tenga que emigrar
Recuerdame... si mi guitarra oyes llorar
Ella con su triste canto te acompañará... hasta que en mis brazós estés...
Recuerda... me...
-Ay chino... no sabes cuanta falta me haces aquí.
Miguel no soportó más y dejó fluir las lagrimas que recorrian su rostro nublando su vista.
Escucho que alguien se acercaba a su ubicación, no le tomó mucha importancia, el solo seguia mirando al pequeño altar de Hiro que habia hecho como cada año.
La persona que de acercaba era Adela quien vestia un hermoso vestido amarillo cempasúchil muy elegante, con su cabello largo y negro peinado con bucles, labios rojos y un cempasúchil blanco adornando su cabello. Venia buscando a Miguel, tenia que dar un concierto en la plaza por el dia de muertos y se estaba haciendo tarde para ello.
-Me imaginé que estarias aquí.
Al escuchar la voz de la mujer Miguel volteo a verla limpiandose las lagrimas
-Adelita...
-Tenemos que irnos, la gente en la plaza te esta esperando.
-Lo siento, es solo que queria estar un rato más con Hiro esta noche...
-Lo se... creeme que si no fuera por lo del concierto no te interrumpiera.
-Si, lo se... bueno... sera mejor que me vaya a cambiar rapido.
-Vamos, estoy segura que Hiro quiere escuchar la otra canción que le tienes preparada para hoy. Lo harás bien.
Miguel se levantó del suelo dejando detras suyo el pequeño altar acompañando a Adela hacia su casa y de ahi a la plaza ya cambiado.
Al llegar a la plaza vieron que todo el pueblo de Santa Cecilia estaba reunido solo por escuchar al joven Rivera quien vestia un elegante traje de charro color negro. Miguel subio al escenario con su guitarra junto a la banda que lo acompañaba una canción muy famosa y muy llegadora... Amor Eterno...
-Esta canción se la dedico a todas aquellas personas cuyos seres queridos tuvieron que partir al lado de Dios pero que ahora nos cuidan y tengan por seguro, que la muerte no es un adios, ni un final... esta canción... es para ti Hiro Hamada, la canto para tí con todo mi corazón donde quiera que estes...
Tu eres la tristeza de mis ojos
Que lloran en silencio por tu amor
Me miro en el espejo y veo en mi rostro
El tiempo que he sufrido por tu adios
Obligo a que te olvide el pensamiento
Pues siempre estoy pensando en el ayer
Prefiero estar dormida que despierto
De tanto que me duele que no estes
Como quisiera ahhh que tu vivieras
Que tus ojitos jamas se hubieran cerrado nunca y estar mirandolos
Amor eterno e inolvidable
Tarde o temprano estare contigo para seguir amandonos
Yo he sufrido tanto por tu ausencia
Que desde ese dia hasta hoy no soy feliz
y aunque tengo tranquila mi conciencia
Se que pude haber yo hecho mas por ti
Miguel cantaba con tanta intensidad y con tanta tristeza que a ratitos pareciera que romperia en llanto, estaba haciendo un gran esfuerzo de no hacerlo para no arruinar el espectaculo, sobre todo que seguramente Hiro lo estaria escuchando y no quisiera preocuparlo.
Adela al darse cuenta de que Miguel no lo soportaria más tomó un microfono y subió al escenario para ayudar a su amigo a seguir cantando lo que seguia de la canción en lo que Miguel hacia una pausa para recuperarse.
Oscura soledad estoy viviendo la misma soledad de tu sepulcro
Tu eres el amor del cual yo tengo el mas triste recuerdo de acapulco
Miguel sentia estremecerse al escuchar a Adela cantar, era la primera vez que compartian escenario, 2 musicos con el alma rota, llorando por un amor que tuvo que partir antes de tiempo, eran hermanos del mismo dolor ya que no existe dia en que ella no piense en Tadashi.
Miguel volvio a tomar fuerza acompañando a Adela en su canto.
Como quisiera ahhh que tu vivieras
Que tus ojitos jamas se hubieran cerrados nunca y estar mirandolos
Amor eterno e inolvidable
Tarde o temprano estare contigo para seguir amandonos.
Todos en el pueblo aplaudian euforicos, la gente estaba maravillada ante el talento del joven Rivera y de Adela quien tomo fuerte la mano derecha de Miguel al recibir los aplausos.
Mientras el mexicano miraba de izquierda a derecha al publico su mirada se detuvo al frente de el en la primera fila, eran 2 esqueletos que estaban parados en frente de la fila mirando hacia Miguel y Adela, eran Hiro y Tadashi quienes estaban abrazados mirando y sonriendo al frente, Miguel sintio como su corazón latia con fuerza al ver a Hiro frente a el, realmente escuchó la canción que le habia dedicado. El joven volteo a ver a Adela quien estaba viendo lo mismo que el, quedo helada, pero a pesar de ello no se quebro, si no sonrio y lanzó un beso hacia donde estaba Tadashi.
-Ya ves? El tampoco te ha olvidado.
Dijo Adela aún tomada de la mano de Miguel mientras ellos 2 se despedian del publico y cuando volvieron a ver al frente los 2 esqueletos ya se habian ido.
-Al menos ya estan juntos...
Dijo Miguel con una sonrisa en su rostro.
-Ellos nos estaran esperando, hasta entonces, demos lo mejor de nosotros.
"Mi amor por ti, siempre será eterno, mi amado chinito"
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Gracias por leer! Espero les gustara mi historia, si no, no me juzgen feo.
Ahora, si me disculpan voy a ir a llorar y a cantar un rato >:''''v
