》 Jin 《

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UN DIA EN LA VIDA DE KIM SEOK JIN


Llegue a casa acompañado de alguien, sinceramente no recuerdo quien me trajo a casa y agradezco que me ayá dejado sano y salvo.

Entre por la puerta tracera del jardín, lo bueno de mi casa es que hay unas escaleras cerca y esas mismas llevan a mi cuarto.

Agradezco a mi padre que haya echo construir de esa forma la casa. Me saque los zapatos que rechinaban demasiado, luego fui descalzó hacia mi cuarto no quería de ninguna forma tener ningún discursito de parte de mis padres.

Hoy me la pase muy bien, de echo es el mejor cumpleaños que tuve en años, desde que conocí a los chicos nuestras vidas han dado una vuelta rotunda, siempre con trajes detrás de nuestros padres, ahora ganamos nuestro propio dinero es mas cuanto quisieramos todos irnos y alejarnos de nuestras familias, esas familias que en vez de darnos calor humano solo quieren dinero y mas dinero...

No puedo creer cuanto hemos crecido como personas, pensaba en la vida hasta que después de tanta pensadera concilie el sueño que más buscaba.



🎀



La luz llegaba a mis ojos absolutamente no quería despertar, jamas había sentido tal cosa en vida mi cabeza giraba, y hasta el mas mínimo sonido hacia retumbar todos mis sentidos, tenia ganas de vomitar y sacar de alguna forma la culpa de mi cabeza, pero ¿QUE CULPA?
¡¡Recuerda Jin recuerda!! me decía a mi mismo mientras jalaba mis cabellos, a decir verdad ¿RECORDAR QUE...?

Esta bien... Pongamos las cosas claras ¿QUE PASO ANOCHE? estoy como el gordo de la película que paso ayer? O ¿hací era? Dios que hice ... Mientras ponía en orden mis pensamientos entro alguien en mi cuarto haciendo el típico rechinido de puerta  !!LA MALDITA PUERTA CRJ !!!! Mi cabeza estúpidos !!!! Estaba furioso por ese estupido sonido...

Joven Jin... su padre y madre lo esperan para desayunar y su padre dice que quiere hablar seriamente por su salida de ayer.

Gracias... Teodoro -dije con arrogancia...

Antes que me vaya, a mano derecha tiene un vaso con agua y su aspirina tómeselas antes de bajar.

Gire y si a mi derecha estaba la famosa aspirina, aunque odio que mi padre no me deje hacer lo que yo quiera pues Teodoro me mima como a su hijo, cuanto a que ya me cubrió sobre mi salidita mi viejo Teodoro un gran mayor domo.

Me duche rápidamente tome la pastillita y me puse una comoda ropa deportiva por si mi padre y mi madre me sermonean, diré que me fui a correr de echo esa sera mi forma de librarme de ellos.

La Chica Extranjera que Ame hasta la Media Noche ... |FINALIZADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora