Me desperté como cada jodido día, le tenía un asco increíble al invierno. Odio la lluvia, el frío y la nieve. Pero lo que más odio en este mundo es la Navidad. Og, que asco. ¿Por qué en Navidad está toda la familia unida y en un día normal no? En fin, abrí la ventana y me encuentro con toda la ciudad nevada. Increíble. Encima nieva. Así que cogí el jersey mas calentito, mis pantalones negros y unas botas. Antes de salie cogi mi abrigo y un gorro. Y salí de casa para irme al instituto.
-¡Buenas, Emily! -dijo Liv.
Liv era una de mis mejores amigas. La conozco desde pequeña, pero ese no es el caso. El caso es que lo bueno del instituto hay calefacción porque si no nos morimos de frío allí dentro.
Entramos a clase y nos tocaba Psicología, el mismo rollo de siempre. Así que al terminar Liv y yo nos decidimos fugar. Fuimos al bar al que vamos siempre y allí nos esperaba Max.
Max me encantaba, estaba enamorada de él pero él pasaba de esas cosas.
-Ey, chicas, bebed un poco para entrar en calor. -nos dijo señalando unos chupitos de ron.
Liv y yo no lo pensamos dos veces y bebimos.
-¿Cómo que vienes aquí tan temprano? -le dojo Liv mientras yo me encendí un cigarro.
-Me apetecía fiesta.-respondió- ¿me pasas uno?- refiriéndose a los cigarrillos.
Le dí uno y se lo encendí.
-Me han dicho que hoy hay fiesta en casa de Chris,¿os apuntáis?
-¿Quién te crees que somos? Pues claro. -dije.
Él sonrió.
Llegué a casa y como siempre no había nadie.
''Hay pizzas en el frigo, haztelas para comer, cenar o lo que sea.''
Las típicas notas que dejaba mi madre porque siempre está ''trabajando'' o eso dice ella.
Cogí una manzana y me metí en la habitación. Al rato ya recibí tres mensajes. Uno de Liv y dos de Max.
Abrí primero los de Max:
-Hey.
-La fiesta es a las 8 en casa de Chris.
Al verlos sonreí como tonta. Y el mensaje de Liv ponía:
-Puta, a las 8 en casa de Chris.
Como no, Liv avisando.
Al llegar las 7:30 me vestí y me dirigí a casa de Chris. Llevaba una botella de whisky conmigo. Al llegar a su casa estaban ya todos allí, saludé y me puse a bailar.
Max se acercó a mi con un vaso de cerveza y empezamos a bailar.
Al rato, me puse a buscar a Liv por la parte de arriba de la casa pero me dirigí al baño a vomitar, estaba muy mareada. Abrí la primera habitación que encontré y me tumbé en la cama. Pero al rato alguien abrió la puerta, era Max.
-Por fin te encuentro. Liv te busca.
-Pf, pues igual que yo a ella. -Me senté dejándole un hueco a Max en la cama.
-¿Estás bien? -se sentó a mi lado.
Yo no aguanté más y le besé. Él no estaba por la labor de seguirme el beso y paró.
-Emily..
-¿Qué, joder Max? ¿Qué pasa ahora?
-Que estás borracha.
-No lo estoy.
-Sí, sí lo estás.-dijo y se fue dando un portazo.
-Solo estoy enamorada de ti, gilipollas.
