Capítulo 1.

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Suspiro por cuarta vez en el día, es agotador ver a Jimin todo el día.

Vecino, compañero, mejor amigo, eres un dolor impresionante de huevos.

Recuerdo la primera vez que te vi, estabas justo en frente de mi casa, con un peluche realmente horrible al cual le decías Chimmy, ese perro amarillo...  No te despegabas de el, porque decías que era tu mejor amigo.

Recuerdo la cara de tristeza que tenias al llegar, posiblemente por dejar a tus amigos atrás, por irte a lo mejor sin despedirte, pero algo me llamo la atención.

A sí, fue por esa sonrisa y corrida extraña que venían hacía mi.

—Hola niño, soy Park Jimin, tengo seis años.—Esos enormes ojos cafés.

—Min YoonGi.—Te respondí sin sonrisas, sin expresión.

—¿Seamos amigos?—Preguntaste, solo asentí, agarraste mis juguetes y te sentaste a mi lado.

Nunca más pude sacarte de mi vida.

Hoy a mis 17 años, puedo decir que si no fuera por tu estúpida sonrisa, sería realmente un amargado.

Y aunque si lo soy, puedo contar contigo... Mi mejor amigo.

No sabes como duele decirte así.

***

Está claro afuera. Hace un horrible calor y yo solo quiero dormir.

Pero sé que él, va a atravesar la puerta de mi habitación, o aparecerá en mi ventana, en cualquier momento.

Me estoy dando por vencido a el deseo de dormir.

—¡Hyung!—Grita Jimin, agarro una almohada.

Se la tiró.

—¡Despierta Hyung!—Salta sobre mi.

—Pesas Jimin...—Alego y él solo se ríe de mi comentario.

—¿Vamos afuera? —Hace un puchero.

—No quiero.

Me mira enfadado.

—Por favor, estan los chicos afuera.—Dice como si eso para mi fuera la gran cosa.

—¿Esta Jungkook?—Preguntó y por su sonrojo sé que sí.—No voy a bajar, por que la laucha está.

—Por favor Hyung.—Me ruega.

—Dije que no, además me abandonas y me dejas con todos los otros retrasados, solo porque tienes ojos para "Jungkook"—digo agudizando en modo de burla el nombre.

—Sabes que me gusta... Te lo pido Hyung.—Y menos ganas de salir tengo.

—Voy a dormir Jimin.

—Eres un aburrido.—Me alega, pero se recuesta a mi lado.

—¿No vas a salir?—Pregunto.

Me niega y se cruza de brazos.

—Quiero también estar contigo, eres mi mejor amigo después de todo...—Su sonrisa es fingida, sé que quiere bajar y jugar con los idiotas.

—Esta bien, malditasea... Vamos Jimin—Me levanto y su resplandeciente sonrisa aparece.

Ese diente chueco.

Diría que si tuviera un arreglo perdería aquello tan dulce.

Salimos.

Veo a Hoseok, Taehyung, Jin, Namjoon y Jungkook.

Están jugando fútbol.

Odio el futbol, implica correr.

Miro a Jimin, sabe que odio correr.

Pero solo levanta los hombros y susurra un "lo siento".

Al final me quedo sentado afuera, bajo la sombra, mientras ellos corren.

Taehyung y Hoseok no han dejado de mirarme y eso me ofusca.

Si no alejan sus asquerosos ojos de mi, se los sacare con una cuchara y se los daré a mis peces...

Jimin nota mi enfado y a pesar de que esta jugando con su gran amor secreto, lo deja y viene conmigo.

Por cosas como esas mi corazón se agita, por que es capaz de abandonar a el chico del cual esta enamorado, para venir conmigo, no sé si sería capaz de hacer lo mismo...

—¿Que pasa Hyung?—Pregunta, sentándose junto a mi debajo del árbol.

—Tus amigos me miran como un objeto turístico.—alego.

Él chasquea la lengua y me sonríe.

—¿Deberiamos besarnos para romper la tensión?—Sé que lo ha sacado de los simpson, pero maldición, ¿Porque tenía que decirme a mi esas cosas?

Lo miro enojado.

—Esta bien, no lo haré, sé que no eres esa clase de chico hyung
—Dice.

"Esa clase de chico".

Jimin jura que mi patio es contrario al suyo. Púes, no, maldición, tiro hacia el mismo lado del equipo que él, pero sólo no he tenido el valor de decirle que me gustan los chicos, o al menos me gustan desde que lo conozco.

Y es malditamente frustrante.

Aun así, no se mueve de mi lado.

Jungkook lo llama para jugar y se aferra a mi brazo.

Trato de alejarlo de mi, el condenado a adquirido más fuerza, así que no logro que se quite.

Le digo en un susurro que vaya, que me deje ahí pero solo mueve su cabeza negándose a ir.

—Mi corazón me molesta cuando estoy cerca de él.

Y sé a lo que se refiere.

Porque mi maldito corazón no ha dejado de agitarse brusco en mi pecho por su cercanía y por no querer ir donde Jeon.

—Voy a ir a dormir Jimin, ve con Jungkook.—Trato de pararme pero él solo me niega.

Es tan lindo...

Cierro los ojos debajo del árbol, posiciona su cabeza en mi hombro, lo escucho tararear.

Me relaja escucharlo, que al final me duermo de verdad.




Siento una mirada inquietante y por inercia abro los ojos, me espanto al ver al par de babosos mirándome mientras duermo.

—Alejense de mi, sino quieren terminar fracturados.—amenazo.

Ambos retroceden y se van.

Jimin sigue apoyado en mi.

Esta oscuro...

Me estiro, muevo a Jimin y este despierta.

—Vamonos.—Susurro y él asiente.

Sus ojos dormilones son demasiada ternura, así que apenas se para me dirijo a mi casa, sin decir nada, solo me marcho.

Llego a mi habitación, miro de soslayo por la ventana y aprecio a Jimin conversando con Jungkook.

Cierro la ventana y de paso la cortina.

No me interesa saber si se forma una pareja, menos si se trata de mi mejor amigo.



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