¿Qué el amor a primera vista no existía?
¿O al menos, qué no te puede atraer alguien sin antes haberle hablado, sólo observado?
Para Thiago esas dos teorías eran absolutamente falsas.
Él vivía en Whispertown; dónde por grandes casualidades de la vida, llovía casi todos los días.
El chico ya le había tomado el tiempo; todos los días a las 6:30 pm una chica pasaba por el frente de su casa, y él como de costumbre, estaba sentado en la puerta para verla. Para ser sinceros, la chica era un poco extraña; todos los días venía del colegio mojándose por la lluvia que día tras día arreciaba en la ciudad (O al menos suponía que era del colegio, pues su ropa parecía ser claramente un uniforme). Aún así esto no le impedía sentir atracción, más bien, le causaba cierta curiosidad.¿No tendría dinero para comprar un paraguas?
¿No le molestaba tener que lavar su ropa todos los días?
¿No le importaba que la gente la tomara por rara?
Estás solo eran algunas de las muchas preguntas que no le permitían dormir por las noches y que le intrigaban a más no poder.
Tenía muchas ganas de hablarle, eso era desde los pasados 2 meses que llevaba observándola.
Hasta que un día; lo mismo, caminaba frente a su casa con la camiseta blanca completamente empapada, al igual que su corta falda y corbata azul marino, también su pelo largo y negro.
Se adentró corriendo a la casa y tomó un paraguas rojo de la cocina.
-¿A dónde vas tan apurado hijo?.-Cuestionó su madre en cuanto lo vió. Pero él no contestó, si no que se dispuso a atravesar la puerta a toda prisa.
Salió de la casa como un correcaminos para alcanzar a la chica, mientras abría el paraguas en el proceso.
Finalmente se había armado de valor y no estaba dispuesto a detenerse a pensarlo con claridad para no echarse atrás.
-Hey! señorita. No es justo que te estés mojando, y más con el uniforme. ¿Necesitas que te encamine a algún lado?.-Dijo en el momento en que llegó a su lado, y posó la sombrilla sobre ambas cabezas para refugiarse de las frías gotas de lluvia.
-Me preguntaba cuanto tardarías.-Dijo la chica con una sonrisa.
-De qué hablas?.-Preguntó Thiago extrañado.
-Es que siempre te veo observándome con una mirada curiosa. Déjame y adivino, te preguntarás; ¿Acaso esa chica tendrá problemas? ¿Cómo es que camina todos los días bajo la lluvia?
-No... Yo sólo, quería ser de ayuda, no tenía la intención de hacerte sentir mal.-respondió cabizbajo.
-Sólo bromeo.-río.-Es un muy lindo gesto... ¿Cuál era tu nombre?
-Thiago.-dijo emocionado. Pues no creía que esto estuviera pasando.
-Mucho gusto extraño chico que solía observarme desde la cera de su casa.-Dije entre risas.-Yo soy Aysha.-continua. -Thiago, lo que quería decir es que lo considero un gran gesto. Pero la verdad es que la lluvia no me molesta; si así fuera, créeme que no dejaría el paraguas en mi casa.
-Oh...-Respondió triste.-Me explicas porqué?
La curiosidad persistía después de todo.-Pues porque he aprendido a apreciar esos pequeños y hermosos detalles de la vida, esos que nadie ya toma en cuenta. La verdad es que la lluvia me encanta, y para mi es un verdadero placer ser de las pocas personas que no tienen miedo a mojar su ropa y disfrutarla.
A Thiago le gustó y sorprendió mucho la manera de pensar de Aysha.
-Eso es increíble.-A él también le gustaba mucho la lluvia, pero a diferencia de ella, no hacía tal cosa.
-Te molesta si te acompaño a tu casa?.-Dijo mientras cerraba la sombrilla.
-Te vas a mojar?.-Preguntó algo sonrojada y extrañada.
-Si, después de todo tienes toda la razón.
-Pues gracias. Adelante, no tengo ningún problema.-Dijo con una sonrisa en el rosto, pero tímida a la vez.
Y así se encaminaron a su casa hablando de temas triviales. Esta, sería la primera vez de muchas otras en que él la acompañaría a su casa.
Y quizás este par de personas, con el tiempo; se convertirían en algo más.Frase: "Tú dices que amas la lluvia, sin embargo usas un paraguas cuando llueve. Tú dices que amas el sol, pero siempre buscas una sombra cuando el sol brilla. Tú dices que amas el viento, pero cierras las ventanas cuando el viento sopla. Por eso es que tengo miedo cuando dices que me amas."
-Bob Marley.
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La chica bajo la lluvia
Short StoryElla caminaba todos los días bajo la lluvia y a él, le causaba cierta curiosidad. "No es quién te da un paraguas cuando te mojas en la lluvia... Es quién sale a mojarse contigo."